Toyota ha dado un giro sorprendente con uno de sus modelos más futuristas, el Toyota bZ4X, transformándolo en una opción low cost que está llamando la atención en el mercado. Este vehículo, el primero de la marca 100% eléctrico, ha destacado por su diseño singular y su tecnología de vanguardia, pero lo que realmente impacta es su nuevo precio, que parece imposible para un coche de estas características.
El Toyota bZ4X combina una estética moderna con un toque agresivo. Al tratarse de un vehículo eléctrico, carece de la tradicional parrilla frontal, aunque incluye una pequeña parrilla inferior con bordes plásticos. Su capó pronunciado y los plásticos duros en los pasos de rueda le otorgan una apariencia robusta y única. Las llantas, disponibles en tamaños de 18 o 20 pulgadas, complementan su imagen futurista.
Este SUV eléctrico mide 4.690 mm de largo, 1.600 mm de alto y 1.860 mm de ancho, con una distancia entre ejes de 2.850 mm. Su maletero ofrece una capacidad mínima de 452 litros, ideal para quienes buscan espacio.
En cuanto a mecánica, el Toyota bZ4X está disponible en dos versiones. La primera se mueve con un motor de 160 kW (204 CV). Se alimenta de una batería de 71,4 kWh, con la que consigue una autonomía de 506 km. Además, su aceleración de 0 a 100 km/h es de 7,5 segundos. Por encima tenemos una versión más potente. Monta dos motores eléctricos que suman 218 CV y 336 Nm de par máximo. Su autonomía se reduce a 470 km.
El equipamiento es notable, incluso en sus versiones más básicas. Tanto el acabado Advance como el Style Plus incluyen faros Bi-LED, luces traseras LED, y una gama de ayudas a la conducción.
Lo más impactante es el precio. Aunque el modelo tiene un precio de partida de 49.900 euros, Toyota ha lanzado descuentos en su página web que lo dejan en solo 34.500 euros al contado o 32.000 euros financiados, y con el Plan MOVES III, el precio puede reducirse hasta 7.000 euros más, convirtiendo este modelo en una opción low cost difícil de creer para un vehículo tan avanzado. Unas cifras de escándalo teniendo en cuenta todo lo que ofrece.