Cupra ha actualizado su León híbrido enchufable de cara a 2025. Y lo ha hecho con una fórmula que combina diseño afilado, tecnología avanzada y un sistema de propulsión eficiente. No pretende competir con deportivos como los de Porsche, pero ofrece una experiencia dinámica y muy completa para el día a día. Especialmente con las ayudas disponibles.
El renovado Cupra León mantiene unas proporciones compactas, con una longitud de 4,39 metros y una batalla de 2,68 metros, lo que le confiere una buena estabilidad sin perder agilidad en ciudad. A pesar de su enfoque deportivo, su peso contenido de 1.401 kg y el trabajo aerodinámico le permiten destacar entre rivales como el Ford Focus, Volkswagen Golf o Toyota Corolla.
La gran baza de esta versión es su sistema híbrido enchufable, que combina un motor de gasolina 1.5 TSI con un motor eléctrico para ofrecer 204 CV y 350 Nm de par. El resultado es una aceleración de 0 a 100 km/h en 7,7 segundos y una velocidad máxima de 220 km/h, cifras más que suficientes para un compacto familiar con aspiraciones deportivas.
Su batería de 19,7 kWh permite recorrer hasta 131 km en modo 100% eléctrico, un dato muy por encima de la media del segmento. El consumo homologado es de apenas 0,4 l/100 km, lo que lo convierte en una opción ideal para quienes combinan trayectos urbanos y escapadas de fin de semana.
En equipamiento, el Cupra León no escatima. De serie incluye llantas de 19 pulgadas, faros Full LED, navegador, climatizador tri-zona, compatibilidad con Android Auto y Apple CarPlay, así como una extensa dotación de sistemas de asistencia a la conducción y confort.
El precio también es un argumento. Con las ayudas del Plan MOVES III y financiación de la marca, parte desde 30.200 euros. Al contado, la cifra asciende a 37.870 euros aplicando las ayudas, lo que sigue siendo una oferta razonable para todo lo que ofrece.