El mercado de los SUV de aspecto todoterreno está más animado que nunca, y para quienes sueñan con un Land Rover Defender pero no pueden, o no quieren, desembolsar su alto precio, existe una alternativa más accesible y sorprendente: el ICH-X K3. Esta nueva propuesta llega de la mano de una joven marca italiana que ha hecho su debut en España con motivo del Automobile Barcelona 2025, y lo ha hecho con un modelo que no oculta su inspiración en los clásicos del 4x4.
Aunque no cuenta con un chasis de largueros y travesaños como los todoterrenos más puros, el nuevo ICH-X K3 presume de una estética robusta, una tracción total eficaz y una dotación tecnológica de primer nivel. Derivado del Jetour T2 (conocido en China como Traveller o Shanghai T2), este modelo ofrece un enfoque moderno con etiqueta ECO, lo que le otorga ventajas urbanas que no todos sus rivales pueden igualar.
Con una longitud de 4,79 metros y una batalla generosa de 2,80 m, el K3 ofrece un interior espacioso para cinco ocupantes. Su diseño no renuncia a elementos clásicos como el portón trasero de apertura lateral o la rueda de repuesto exterior, detalles que evocan los todoterrenos de antaño. Además, la sensación de confort está muy cuidada, con materiales de calidad y una amplia dotación de serie que no requiere recurrir a opciones.
Bajo el capó encontramos dos propuestas mecánicas. La primera es un motor gasolina de 1.9 litros con 245 CV y 375 Nm de par, asociado a una transmisión automática de doble embrague y sistema 4x4, con un consumo medio de 9,8 l/100 km. La segunda versión combina gasolina y GLP, reduce ligeramente la potencia hasta los 234 CV, y ofrece un consumo combinado de 13,1 l/100 km, pero con el beneficio añadido de la etiqueta ECO.
En cuanto al equipamiento, ICH-X no ha escatimado: el K3 incorpora faros LED, llantas de 20 pulgadas, techo panorámico, y un sistema multimedia de 15,6 pulgadas compatible con Android Auto y Apple CarPlay. También ofrece cuadro digital de 10”, climatización automática, acceso sin llave, tapicería de cuero, asientos ventilados y un amplio abanico de asistencias a la conducción, incluyendo cámara de visión 540º, frenada automática de emergencia y control de crucero adaptativo.
Todo este conjunto se ofrece con un único nivel de acabado, muy completo, sin necesidad de paquetes adicionales. La versión de gasolina parte desde 43.900 euros, mientras que la variante bifuel (GLP) se sitúa en 45.900 euros. Casi la mitad de lo que cuesta el Land Rover Defender más barato, que arranca en 80.800 euros. Una opción real para quienes buscan un coche con carácter, capacidades reales y un presupuesto contenido.