Termina el verano y muchas personas empiezan a pensar en comprarse un coche después de los largos viajes durante las vacaciones. Pero hay que tener mucho cuidado si nos decantamos por comprar un coche eléctrico de segunda mano. Ángel Gaitán, mecánico y creador de contenido, ha puesto fin a sus vacaciones para advertir de los peligros que puede conllevar comprar un coche de segunda mano. Para ello pone de ejemplo lo que le ha pasado a un cliente que ha comprado un Mercedes EQ Power.
“El cliente quiere hacer una comprobación en un coche que tiene treinta y pico mil kilómetros, matriculado en julio de 2021. Lo que él no entiende es que este coche se fabrico en el año 2019”, analiza el mecánico. “Esa batería que es pequeñita, en torno a los 16KW, que viene en la parte trasera y que sirve para circular un poquito en eléctrico y ayudar a bajar esos consumos, pues esa batería está dando la mitad del rendimiento que tendría que dar”, explica.
“Y tú dices, ¿con treinta y pico mil kilómetros ya da la mitad? Treinta y pico mil kilómetros, pero 2019, 2020, 2021, 2022, 2023, 2024… Van pasando los años y esta batería ya va por cinco años. ¿Qué pasa? El problema principal es que cuando las baterías tienen años aunque no tengan kilómetros también sufren una degradación. Y si en un coche con una batería de 100KW nos dice el fabricante que hacemos 800 kilómetros y al final hacemos 600, pues imagínate con una batería de 16KW. Estas cosas son normales, pasan y quiero que lo sepáis”, acaba sentenciando Gaitán. Una apreciación muy importante si queremos comprar un coche eléctrico de segunda mano y que puede influir en el rendimiento de la autonomía del vehículo.