Gavi sigue jugando a pesar de poner en riesgo su salud: los peligros de jugar con grapas

El pasado domingo, durante el partido de fútbol entre Osasuna y Barcelona, el jugador azulgrana Gavi se rajó la oreja al chocar contra Rubén García, futbolista del equipo contrario.

El culé fue atendido fuera del terreno de juego y pudo verse cómo el doctor Ricard Pruna le puso rápidamente unas grapas en la oreja para que dejara de sangrar y así poder seguir jugando.

Esta práctica está siendo muy criticada en la redes sociales. De hecho, algunos profesionales sanitarios como Héctor Castiñeira, más conocido como Enfermera Saturada, también han entrado en el debate.

Los pasos a seguir deberían haber sido: limpiar, vendaje compresivo, desinfectar y suturar

"Lo primero que se debería haber hecho: limpiar la herida. Y después poner hemostásicos -fármacos que ayudan a cortar el sangrado de heridas- o puntos de aproximación. Por último, los suyo hubiera sido ponerle un vendaje compresivo para que no sangrase", detalla Carmen García Retorta, vicepresidenta de la Sociedad Española de Enfermería Dermoestética (SEED).

También apunta que durante las seis horas posteriores al golpe "se considera que la herida sigue limpia por lo que se debe volver a desinfectar tanto los bordes como la herida en sí. Se le puede aplicar algún tipo de anestesia en caso de que sea necesario".

Una vez llegados a este punto, ya sí que "se puede proceder a suturar, bien con hilo o con grapas. Sin embargo, nunca se debe coser una herida si no se ha desinfectado correctamente", remarca la profesional sanitaria.

Una vez que pasan diez días los puntos suelen empezar a caerse o quitarse ya que normalmente la herida suele estar cerrada.

"Gavi no tendría que haber vuelto al campo. Si te tienen que poner grapas es que no estás en condiciones para jugar"

En este caso, tal y como apunta la enfermera, si sólo fueron capaces de cortarle la hemorragia a través de la sutura con grapas, "Gavi debería haber abandonado el partido. Eso significa que no está en condiciones de seguir jugando".

El segundo punto que añade, en relación al uso de este tipo de sutura, es que "no se pueden poner grapas ni ningún tipo de material metálico cuando se está en el campo de juego".

Además de arriesgarse a coger una infección, también se expone a un nuevo golpe en esa misma zona que reabra, e incluso aumente las dimensiones de la herida.

Asimismo, la higiene en las heridas abiertas es fundamental. "Un corte como ese se debe limpiar, desinfectar y coser en un espacio limpio y esterilizado para evitar que los "bichos" se adentren en la herida y se produzca una infección".

Este martes Gavi apareció con un casco durante el entrenamiento de la selección masculina de fútbol para evitar nuevos golpes y proteger así la herida de su oreja.