Aunque el hecho de dormir es una necesidad esencial para el correcto funcionamiento del organismo, todas las costumbres y rutinas que rodean a esta acción son muy personales: la persiana subida o hasta abajo, la dureza de la almohada, la postura...Y, ¿qué pasa con la ropa? Algunas estudios científicos indican que dormir sin ropa puede tener efectos positivos en algunos aspectos de la salud.
A pesar de estos primeros hallazgos, aún queda mucho por investigar para poder concluir científicamente que dormir sin ropa es más saludable que hacerlo con ella.
A medida que pasan las horas del día, el cuerpo cada vez está más cansado. Junto a esto, cuando se acerca la noche, el cuerpo comienza a segregar una hormona: la melatonina. Esta juega un papel muy importante en el sueño, ya que se encarga de regular los ciclos de día y de noche.
A medida que la melatonina aumenta en el organismo, la temperatura corporal central disminuye y continua disminuyendo durante toda la noche, indica la Fundación del Sueño. Esto no significa que debamos abrigarnos más para evitar que disminuya esta temperatura ya que científicamente se ha estimado que la temperatura óptima para dormir oscila entre 18 y 21ºC.
Además, en caso de que la temperatura corporal central disminuya más, el propio organismo "experimenta procesos regulatorios y regeneradores mientras dormimos, por lo que al estar desnudos, éstos se optimizan de forma natural", apunta el Instituto Europeo del Sueño.
Si te gusta acampar o alguna vez has dormido en saco de dormir seguramente te hayan dicho que para no pasar frío lo mejor es dormir sin ropa. Este es el motivo.
Este mismo instituto explica que el hecho de conseguir un sueño profundo es fundamental para la memoria, la producción de la hormona de crecimiento y el crecimiento celular.
Además añade que "la sensación de placer y comodidad estimula la liberación de oxitocina -hormona-, que reduce la presión arterial, estimula el sistema inmunológico, minimiza la ansiedad y protege el corazón.
Dormir con ropa interior sintética y ajustada favorece las condiciones óptimas para que la levadura Candida aumente su presencia provocando una infección denominada candidiasis vaginal, apuntan desde la Facultad de Medicina de Dartmouth Geisel, en Estados Unidos.
Esto significa que dormir sin ropa interior puede ayudar a evitar que dicha levadura aparezca en la zona vaginal.
No está comprobado científicamente que dormir sin ropa sea saludable para piel, pero sí que la falta de sueño empeora "la capacidad de la piel para curar heridas" y hace que esta sea "más susceptible a las arrugas, la caída, la hinchazón y las ojeras", según la Fundación del Sueño.
Aunque no hay estudios que lo demuestren, dormir sin ropa podría aumentar la salud del esperma, destacan desde la fundación. A esta conclusión llegan debido a que está científicamente comprobado que "una elevación de la temperatura testicular produce un deterioro de la espermatogénesis -proceso en el cual se producen espermatozoides-".
Junto a esta afirmación, dicho estudio también indica que la ropa interior ajustada, en comparación con la holgada, "se asocia con temperaturas escrotales significativamente más altas".
Es bien sabido por la población general que el contacto piel con piel entre un recién nacido y su madre tiene múltiples beneficios, entre ellos la liberación de oxitocina, una hormona mencionada al principio del texto relacionada con la interacción social, el bienestar y efectos antiestrés.
Sin embargo, no sólo este piel con piel promueve la liberación de oxitocina, sino también el que se produce al dormir sin ropa con tu pareja, al tratarse de una interacción positiva entre adultos, según indica la Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos.
Además de la reducción del estrés, hay estudios que evidencian que el hecho de dormir desnudo con otra persona ayuda a aumentar la autoestima de uno mismo con la imagen de su cuerpo.
A pesar de los posibles beneficios que tiene dormir sin ropa, no todo el mundo se siente cómodo haciéndolo. Si se quiere empezar a poner en práctica dicha rutina, la Fundación del Sueño aconseja ir progresivamente, es decir, ir quitando ropa poco a poco por las noches para que el cuerpo se vaya acostumbrando.
Si aún así no te convence la idea, una investigación revela que la ropa de dormir fabricada con lana, en comparación con la de poliéster y algodón, impacta positivamente en la calidad del sueño, sobre todo en personas mayores que les cuesta dormir.