Preocupación entre farmacéuticos por el abuso de antibióticos para infecciones infantiles

Entre los 0 y 4 años, es el rango de edad en el que más antibióticos se administran. Ante esta realidad, la Sociedad Española de Farmacéuticos de Atención Primaria (SEFAP) ha advertido sobre el uso indiscriminado e indebido de antibióticos para tratar infecciones infantiles, la mayoría provocadas por virus.

La resistencia a los antibióticos es “una de las mayores amenazas para la salud mundial, la seguridad alimentaria y el desarrollo”, han recordado los farmacéuticos de Atención Primaria. Su uso indebido hace "cada vez más difícil" el tratamiento de determinadas infecciones por la pérdida de eficacia de los fármacos.

La SEFAP conciencia a la población sobre su correcto uso

En este sentido, la SEFAP ha lanzado una campaña con una infografía dirigida a la población general, y en especial a progenitores y cuidadores, con información sobre cómo manejar las infecciones pediátricas, la mayoría provocadas por virus y que no precisan del uso de antibióticos, cuya administración puede tener consecuencias negativas.

“Los padres, madres u otros cuidadores muchas veces se ven sin recursos para tratar a sus niños o niñas ante síntomas como fiebre, tos o dolor de oídos o de garganta, y consideran que el uso de antibióticos podría ayudar, pero hay que recordar que hasta el 80 % de las infecciones invernales de la nariz, los oídos, la garganta o los pulmones son producidas por virus, por lo que administrar antibióticos a los menores no aliviará estos síntomas ni curará la infección”, explica Esther Trillo, miembro de la SEFAP.

Los niños de 0 a 4 años son los que antibióticos consumen

Según datos del Ministerio de Sanidad, de 0 a 4 años es uno de los rangos de edad (junto al grupo de población mayor de 75 años) donde más antibióticos se consumen, por lo que los farmacéuticos de primaria insisten en que es "muy importante saber que los antibióticos sólo son de utilidad si hay una infección que es causada por una bacteria".

SEFAP subraya que los pediatras son "las personas indicadas para decidir en qué casos el uso de antibióticos puede suponer un beneficio para el paciente" y reitera evitar la automedicación con antibióticos que hayan podido sobrar de un tratamiento previo.

Asimismo, insta a vacunar a los menores según el calendario de cada comunidad autónoma.