Chuando Tan es un fotógrafo de Singapur que cuenta con 1,4 millones de seguidores en Instagram. Sin embargo, el motivo de su popularidad no es su trabajo, sino más bien su físico y su increíble apariencia de un hombre de 30 años, cuando en realidad el pasado 3 de marzo cumplió 58 años. Este subió a Instagram un conjunto de siete fotos evidenciando que a pesar de su excelente apariencia física, nació en el 1966.
La búsqueda de la juventud eterna es un reto que muchas empresas de cosméticos tienen por delante, pero parece que este singapurense tiene la llave. Aunque él mismo ha confesado cómo lo hace, gran parte de sus seguidores siguen sin dar crédito.
No cuenta con retoques faciales conocidos, de hecho, ha reconocido que le regalaron una sesión de botox, pero no le gustó nada la experiencia. Respecto a los productos cosméticos tan sólo utiliza un gel para lavarse la cara y una crema hidratante facial. El único retoque que asegura hacerse de forma habitual es teñirse porque tiene muchas canas.
A pesar de que el fotógrafo ha desvelado el secreto de su apariencia tan jovial, esto no puede extrapolarse a todas las personas por igual ya que hay que tener siempre presente tanto el principio de individualización como el matiz genético.
En cuanto al ejercicio físico, el fotógrafo asegura que entrena cuatro días a la semana. Durante 30 minutos hace ejercicios de pesas, para trabajar la parte anaeróbica y disfrutar de los beneficios del entrenamiento de fuerza, y después una hora de ejercicio cardiovascular para potenciar la parte aeróbica.
Además, para tonificar su cuerpo, tal y como se puede ver en sus publicaciones, practica natación a diario.
El otro aspecto que cumple estrictamente es el cuidado de la alimentación. Lo que se sabe es que desayuna seis huevos duros con aguacate y leche, come pollo con arroz y sopa de pescado con verduras, y cena ensaladas frescas. De esta forma Chuando Tan abastece a su cuerpo con proteínas, hidratos de carbono, minerales, vitaminas, grasas y agua.
Un punto característico, y muy importante según la evidencia científica, es que evita consumir bebidas estimulantes y alcohol. Los helados también son un producto del que suele privarse, aunque cuando se da el capricho de comerse uno lo hace por las mañanas para poder quemar el exceso de calorías durante el resto del día.
Junto a la dieta y al ejercicio físico, el singapurense cuida también mucho sus horas de sueño. Su rutina se basa tanto en levantarse como en acostarse temprano, 7a.m. y antes de las 23 p.m., respectivamente.
Entre siete y ocho horas son las que debe dormir un adulto, según la Academia Americana de Medicina del Sueño; cuestión que Chuando Tan sigue a la perfección. La hora a la que concilia el sueño, antes de las once de la noche, también es algo que recomienda la ciencia.
“Acostarse temprano merece la pena”, asegura el fotógrafo. "Después de un sueño reparador, podrás hacer muchas más cosas durante el día”, añade.