David Bustamante ha confesado que el rascador de espalda es un objeto al que tiene mucho aprecio. Aunque a priori puede sonar cómico, el cantante explicó que gracias a este elemento podía rascarse la espalda sin dificultad. La cosa no queda ahí, sino que argumentó aún más su respuesta al detallar que su falta de elasticidad le impide llegar a esa parte de su cuerpo.
Además añadía que el motivo por el que su flexibilidad es tan limitada es porque entrena con pesas. Esta es una creencia vinculada con el entrenamiento de fuerza desde hace años, sin embargo esto no es del todo cierto. Aunque es verdad que uno de los principales problemas de los culturistas es la falta de movilidad y flexibilidad, el nutricionista Saúl Sánchez despeja las dudas.
"La flexibilidad se pierde por no entrenar la movilidad", asegura el mismo. Esto significa que aunque es cierto que el "hecho de levantar pesas durante años provoca cierta hipertrofia y acortamiento de tejidos, no tiene por qué volverte rígido siempre y cuando la trabajes".
Para no hablar de generalidades, Saúl Sánchez explica su caso concreto, el cual es bastante similar al de David Bustamante. Desde que tenía 12 años, el también experto en nutrición deportiva, ha entrenado con pesas, sin embargo, al mismo tiempo practica jiu-jitsu brasileño -un arte marcial que se basa en la lucha cuerpo a cuerpo en el suelo-.
Este tipo de deporte de combate "requiere de mucha flexibilidad de piernas y caderas", motivo por el que su tren inferior tiene gran movilidad. Sin embargo, de su tren superior no puede decir lo mismo: "en esa parte soy super rígido porque no lo entreno".
"No existen muchas evidencias conformes de que la pérdida de flexibilidad, hasta cierto punto, aumente el riesgo de lesión", asegura el profesional, aunque sí es cierto que "puede ser un poco limitante". A lo que añade que "si tú eres capaz de hacer un press de banca con la barra tocando el pecho, en principio no deberías tener demasiado riesgo de lesión, sino que el problema viene cuando la falta de flexibilidad te impida llegar al pecho".
Además apunta que a pesar de que los entrenamientos de fuerza pueden afectar a la elasticidad, hay que tener en cuenta que no todo el mundo es igual de flexible sino que depende de los condicionantes genéticos. "El trabajo físico potencia nuestras características, sobre todo, en las que más destacamos", concluye el experto.
La elasticidad se entiende como la "capacidad de la musculatura, tendones y fascias adyacentes de alargarse y recuperar su posición natural de reposo", explica en su blog el entrenador personal Juan Rallo.
Un término que suele utilizarse como sinónimo de elasticidad es la flexibilidad, sin embargo tiene ciertos matices diferentes. Este segundo se define como la libertad de movimiento de un músculo sin que se rompa o se dañe. Otro término a destacar es la movilidad articular que como su nombre indica es la capacidad de movimiento que tienen las articulaciones de una persona.