Salta a la vista que Eduardo Navarrete tiene más de un retoque estético y este no se esconde en decirlos y mostrarlos. Además de confesarlos en algunos programas de televisión, el diseñador de moda los explicado en sus redes sociales a medida que se los ha ido haciendo.
La masculinización facial está dentro de la lista de los tratamientos que se ha realizado para cambiar su apariencia física. Esta técnica sirve para definir y matizar los rasgos faciales masculinos aplicando ácido hialurónico en puntos concretos del rostro, especialmente en mandíbula, mentón y pómulos.
Cabe destacar que, a diferencia de una operación estética, en el caso de la masculinización al tratarse de un retoque los resultados son inmediatos, pero tienen una duración limitada, motivo por el que las clínicas recomiendan renovarse el tratamiento cada 12 o 18 meses.
El proceso en sí mismo no suele durar más de 45 minutos y aunque pueden aparecer algunas molestias estas suelen desaparecer desaparecer de manera rápida. Antes de iniciar el tratamiento, los profesionales deben analizar las facciones del paciente para buscar la simetría del rostro y conseguir los resultados esperados.
Además de la masculinización facial, Eduardo Navarrete se ha colocado un balón gástrico para bajar de peso. Este se coloca en el estómago ocupando un determinado espacio con el objetivo de que la persona se sienta saciada con menos cantidad de comida.
Bichectomía, para eliminar la grasa de las mejillas, aumento de labios, rinomodelación, para corregir las imperfecciones de la nariz -se diferencia de la rinoplastia en que esta no es una cirugía- y reducción de papada son otros de los tratamientos estéticos por los que el diseñador de moda ha pasado.
Hace no tanto tiempo el cuidado de la imagen y el aspecto físico era 'cosa de mujeres', sin embargo, esto ha cambiado y la población masculina se ha unido a esta tendencia. De hecho, cada vez más hombres reclaman operaciones y retoques estéticos, aseguran desde la Sociedad Española de Medicina Estética (SEME).
Aunque este género sólo representa aún el 20% de los pacientes que recurren a la medicina estética, "esto supone un avance muy importante en un mercado que hasta hace muy poco era dominado muy mayoritariamente por las mujeres. Sin embargo, el rápido incremento de la demanda masculina hace prever que en los próximos años se alcance la paridad", señala la SEME.