El debut de Rafa Nadal en la que con mucha probabilidad podría ser la última participación en Roland Garros de su carrera está cerca. Se enfrenta a Alexander Zverev, un duro contrincante, ya que el alemán llega tras coronarse con victoria en el Masters 1000 de Roma y con el puesto 4 en el ránking ATP. Si el español despliega su mejor tenis y consigue vencer a Zverev, lo que sería una gesta brutal, tendría por delante un duro torneo con Djokovic en el horizonte, al que se enfrentaría en semifinales.
Los aficionados de Rafa Nadal, aquellos que llevan siguiendo al mallorquín desde sus inicios, saben que la carrera deportiva de este está llegando a su fin. Esto es algo para lo que seguramente se han preparado ya psicológicamente. El último torneo que ha disputado terminó con un buen sabor de boca tras caer en la segunda ronda con un marcador final de 6-1 y 6-3. ¿Se repetirá la historia en Roland Garros? Una vez asumida su retirada inminente, ¿están los fans preparados para la, ojalá no pase, dura imagen de verle caer en primera ronda en su probable último Roland Garros?
En ElDesmarque hemos preguntado a Javier Bonilla y Javier Soriano, ambos psicólogos deportivos, sobre la forma en la que puede afectar a sus más fieles seguidores la despedida definitiva de Rafa Nadal del torneo en el que tiene el récord, catorce títulos entre 2005 y 2022.
Es difícil hacer entender a una persona que no es fan o seguidora de alguna figura del mundo del deporte, música... lo que significa que su referente deje para siempre su carrera. "Un fan es una persona que se identifica con los éxitos del deportista, con su imagen, que se siente parte de una comunidad. Esto genera empatía y simpatía hacía todas las emociones que genera esta persona, ya sea identificarse con sus emociones de alegría cuando consigue un éxito o de tristeza y frustración cuando no salen las cosas como se esperaban", define el profesional.
Es cierto que todos los seguidores de un deportista de élite concreto, como es el caso de Rafa Nadal, saben que su carrera deportiva va a tener un final, sin embargo suelen verlo como algo muy lejano en el tiempo. Cuando este momento llega, el psicólogo deportivo asegura que sus seguidores deben pasar un pequeño duelo.
Independientemente de que Rafa Nadal gane o pierda contra Zverev, sus seguidores van a vivir el partido con un sabor agridulce ya que saben que se trata de uno de los últimos partidos de la historia de su referente deportivo, "aunque quieren que su deportista gane, este partido genera sentimientos de tristeza porque no van a volver a vivir una situación así de nuevo", apunta el experto en psicología deportiva.
Para afrontar de la mejor manera posible este duelo, Javier Bonilla considera que ver los últimos partidos acompañado de familiares o personas que compartan el mismo sentimiento de comunidad hacia Rafa Nadal ayuda mucho.
"Lleva tiempo dando señales de que su carrera deportiva está llegando a su fin por lo que el fan también tiene que ir anticipándose a ese duelo, a esa pérdida que va a tener que vivir. Esos partidos van a servir como ritual de despedida. Aunque esto genere sentimientos de tristeza son emociones normales que van a hacer que ese duelo vaya pasando", explica el mismo.
Como último punto señala que no es una pérdida total ni mucho menos, ya que Rafa Nadal va a seguir estando presente en el mundo del tenis por lo que sus seguidores van a poder seguir su pista desde otros puntos de vista.
Pese a la ilusión y la esperanza que existe entre los seguidores de Rafa Nadal de que este haga algo grande en Roland Garros, "somos conscientes de su estado físico", evidencia el psicólogo deportivo, Javier Soriano, a ElDesmarque. Si esa dura imagen se produjera, el primer sentimiento que aparecería en todos y cada uno de sus fans sería tristeza, sin embargo, al momento se producirían pensamientos compensatorios "como el el orgullo de haber visto todo lo que hemos visto de él, la grandeza que nos ha dado durante mucho tiempo...", asegura el mismo.
Cuando una emoción es muy intensa o llega de golpe se puede llegar a somatizar. Si se diera este caso concreto podría aparecer un "sentimiento de no tener ganas de hacer nada, pero es más probable que la gente esté preparada y haya hecho su caminito al saber que este momento tenía que llegar, sobre todo con el tiempo que lleva lesionado", añade.
Si se da el caso de que se tiene que lidiar con esta tristeza es importante "reconocer la emoción y el motivo de esta, que en este caso sería fácil. Lo segundo sería expresarla a nivel verbal y compartirla con otras personas que puedan sentir lo mismo. A modo de terapia de grupo sería bueno recordar los momentos más emocionantes, los éxitos y las alegrías que ha dado", concluye.