La peligrosa técnica de consumir mefedrona antes de entrenar: qué es y cuáles son los riesgos

La mefedrona, también conocida como 4-MMC, ) "es un producto de síntesis química, cuya estructura y efectos muestran cierta similitud con otras sustancias psicoactivas de tipo estimulante como la anfetamina, el éxtasis (MDMA) y la cocaína", define el informe de 'Drogas Emergentes' elaborado por el Ministerio de Sanidad, Política Social e Igualdad.

Se trata de una sustancia que apareció en el mercado hace poco, tanto es así que la primera vez que se tiene constancia de su presencia en Europa fue en 2007. Teniendo en cuenta que se utilizaba como sustituto no ilegal de las anfetaminas y la cocaína -ahora ya sí es ilegal-, su popularidad y consumo comenzó a aumentar entre los jóvenes que consumían otro tipo de drogas; además esta podía conseguirse fácilmente a través de Internet.

Teniendo en cuenta que el mundo de la noche siempre se ha relacionado con el consumo de drogas, no llama la atención el hecho de que esta sustancia comenzase a ser muy atractiva entre la gente que frecuenta estos entornos, especialmente en Europa, América del Norte y Australia.

Sin embargo, lo que realmente está empezando a preocupar es que algunos jóvenes no sólo la consumen en un ambiente de fiesta, sino también para ir a entrenar. Esta es una realidad que al bioquímico y divulgador científico, Álvaro Carmona, le ha dejado muy preocupado, motivo por el que ha decidido explicar qué es y cuáles son los riesgos a través de un hilo en X.

Efectos de la mefedrona tras consumirla

Los efectos de la mefedrona combinan la "estimulación y euforia de la cocaína con la calidez emocional de la MDMA o éxtasis", unos efectos afrodisiacos y "llamativos" para algunos, según explica Antón Gómez-Escolar, especializado en drogas y autor de la 'Drogopedia'.

"A nivel neurológico, la mefedrona actúa liberando grandes cantidades de dopamina y serotonina, neurotransmisores clave para el placer y la recompensa, pero este "subidón" tiene consecuencias graves", introduce el Álvaro Carmona.

"Durante su efecto, la mefedrona sobreestimula el sistema nervioso, provocando euforia, hiperactividad y un aumento de energía, pero esta sobrecarga pone al corazón y cerebro bajo un estrés enorme", continúa explicando.

¿Por qué es una mala idea tomar mefedrona antes de entrenar?

El principal problema de todo esto es que al ser sustancias tan nuevas, apenas se conocen todos sus efectos nocivos a largo plazo así como su toxicidad y riesgos para la salud, por lo que su consumo no está recomendado ni para salir de fiesta ni para entrenar.

Teniendo en cuenta los efectos de esta sustancia, especialmente el llamado "subidón", muchos creen que consumiéndola antes de ir a entrenar podrán rendir más y levantar más peso. Sin embargo, "la realidad es que combinar mefedrona con ejercicio físico intenso aumenta el riesgo de infarto, deshidratación severa y fallo multiorgánico", asegura el también profesor de la Universidad Alfonso X.

A nivel farmacológico, esta sustancia provoca un estrechamiento de los vasos sanguíneos, de tal forma que dificulta el flujo de sangre y de oxígeno a los músculos y órganos vitales; en otras palabras, "te estás asfixiando por dentro". Por otro lado, cuando se eleva de forma drástica la frecuencia cardíaca, teniendo en cuenta que esta sustancia "pone una presión brutal en el corazón" y sumado a que se combina con un esfuerzo físico extra, "puede derivar en arritmias, paros cardíacos o accidentes cerebrovasculares."