Desde 2016, la Organización Mundial de la Salud declaró a España un país libre de sarampión, sin embargo, esto no significa que esté erradicada o exenta de registrar casos, de hecho, ya se han confirmado 110 casos en lo que va de año, más de la mitad de los registrados en 2023.
Si bien las coberturas de vacunación en España rondan el 95%, la reducción de las tasas globales desde la pandemia está provocando repuntes de enfermedades evitables, como es el sarampión, que influyen al mundo entero, incluido nuestro país.
"El sarampión es una enfermedad vírica sumamente contagiosa", define la OMS. Aunque ninguna persona está exenta de contraer dicha afección, los más vulnerables son los niños menores de cinco años sin vacunar o sin la pauta completa.
Se transmite por la vía aérea a través del sistema respiratorio y de las secreciones nasales u orales, es decir, estornudos y tos. "Las personas con sarampión son contagiosas desde la aparición de los primeros síntomas hasta 3-5 días después de la aparición de las manchas -signo más característico-", según detalla el Servicio de Salud de la Comunidad de Madrid.
Al tratarse de una enfermedad causada por un virus, los antibióticos no están indicados, y en su lugar se trata "con descanso y antitérmicos para bajar la fiebre".
Los síntomas no aparecen rápidamente, sino que comienzan a manifestarse entre entre 10 y 14 días tras la exposición al virus. Aunque el signo más visible es la erupción cutánea, es decir, las manchas rojas por todo el cuerpo, también destacan los siguientes:
Si bien es cierto que todas aquellas personas que no se hayan vacunado o que no hayan desarrollado inmunidad pueden infectarse, los grupos más vulnerables son los menores de cinco años, mayores de 30 años y personas embarazadas, los cuales son los que presentan un mayor riesgo de complicaciones como ceguera, encefalitis, diarrea intensa, neumonía e incluso la muerte.
En algunos países de África, Oriente Medio y Asia, esta enfermedad sigue siendo muy habitual, donde los niños con malnutrición, especialmente los que padecen "deficiencia de vitamina A o su sistema inmunitario está debilitado por el VIH u otras enfermedades", son especialmente vulnerables.