Selena Gómez no es una de esas influencers a las que le guste probar con nuevos e impactantes looks. No. La cantante sigue una línea bastante recta en este sentido. No suele aparecer con algún estilo muy distinto al que nos tiene acostumbrados a nosotros y a sus 157 millones de fans que acumula en Instagram.
Selena ha lucido casi siempre con el pelo castaño, a veces más o menos largo, pero sin cambios extremados. Todo lo contrario.
Y no solo eso. Gómez tampoco es de las que les gusta ir presumiendo de cuerpazo. Suele mostrarse muy comedida en este sentido. Y más en su cuenta de Instagram, donde son contadas con los dedos de la mano las fotos en las que aparece en bikini o ropa ligera. Y cuando lo hace no es de forma pretenciosa, como si hacen Kim Kardashian, Emily Ratajkowski y compañía.
A estas y a muchas otras les encanta posar ante sus seguidores en fotos provocativas y subidas de tono. Instantáneas que, además, arrasan en la red.
No obstante, hay que decir que sí hay ocasiones en las que Selena se ha mostrado más atrevida. Tanto en cuanto a sus looks como a su cuerpo. Y para muestra un botón.
Por las redes todavía circula la portada de la revista V Magazine en la que la norteamericana fue protagonista en 2015. Una instantánea en la que aparece con un peinado a lo afro que, lamentablemente para muchos de sus seguidores, no ha repetido. “Guapísima”, “Espectacular” o “Está como nunca”, comentan en redes y foros.
Una foto en la que, además, Selena hace topless. Se tapa con los brazos y no enseña nada, pero aun así estamos ante una de las fotos más atrevidas de la it girl.