Cuando grandes nombres como Irina Shyak, Ariana Grande o Selena Gómez ven su nombre en las redes sociales, ya tiemblan. Y es que es muy habitual que muchos de sus detractores entren en ellas para criticarlas.
¿Cómo? La gran mayoría de veces la opción que más suelen tomar los detractores de este tipo de celebrities es hacer circular fotos en las que no aparezcan precisamente muy favorecidas.
En el caso de Irina, teniendo en cuenta que hablamos de una top modelo internacional, el principal foco de ataque llega de la mano de sus fotos más naturales. Fotos en las que el Photoshop brilla por su ausencia para que la gente pueda descubrir a la “verdadera” Irina.
Y eso es lo que han hecho ahora. Han aparecido unas nuevas fotos de Irina en bikini que, como era de esperar, han generado mucho revuelo en las redes sociales. Entre otras cosas porque, como algunos apuntan, “parece otra”.
La diferencia respecto a este tipo de fotos con las que suele colgar ella en su cuenta de Instagram o con las que acaban siendo portadas en revistas o en vayas publicitarias es el Photoshop.
Y ahí sus detractores no han tenido piedad. “Es muy fuerte cómo nos engañan con esta mujer”, “Madre mía pero sin Photoshop no vale nada”, “A la que le quitan el maquillaje y el Photoshop esta chica es muy normal”, “Es un escándalo que esta mujer con este cuerpo sea una, en teoría, de las más guapas del mundo”, “Irina al natural asusta” o “Es terrible” son tan solo algunos de ellos.
Lo cierto es que la rusa ha preferido no entrar en este tipo de batallas con sus haters. Sabe que eso es lo que buscan, que entre y que se líe aún más en las redes. De ahí que, teniendo en cuenta que lleva ya unos años en los más alto, sepa que este tipo de líos es mejor mantenerlos lejos. El problema para ella es que las fotos siempre estarán ahí.