El último capricho de Cristiano Ronaldo y Georgina Rodríguez: los vecinos están molestos

La ambición que Cristiano Ronaldo demuestra en cada acción dentro del terreno de juego va intrínseca en él también en su vida privada. Así lo demuestra, entre otras cosas, el último capricho que se ha dado junto a su pareja, la influencer española Georgina Rodríguez: se han comprado la mansión más cara de todo Portugal.

No sorprende conocer la vida privada de CR7 y su chica, pues ellos mismos acostumbrar a mostrarla por Instagram. Por supuesto, también enseñan sus lujos: desde coches de alta gama, vacaciones millonarias, joyas exclusivas o inversiones en nuevos negocios. En esta ocasión, han ido más allá y han pensado en el momento en que el jugador cuelgue las botas.

A pesar de tener casa en España, país que le gusta mucho el futbolista portugués, parece que su deseo una vez se retire del fútbol es regresar a su país natal. Pero, por supuesto, tras su larga y exitosa carrera, Cristiano no se va a conformar con un hogar cualquiera para vivir. Por ello el jugador ha comenzado a construir una casa con todo tipo de lujos y servicios, que estará valorada en más de 21 millones de euros cuando se complete, previsiblemente a mediados de 2024.

El nuevo hogar de CR7, con todo tipo de detalles

En la finca de Quinta da Marinha, con más de 2.700 metros cuadrados de extensión y ubicada en una de las zonas más exclusivas de todo el país, el actual jugador del Al-Nassr estaría construyendo un domicilio con cuatro plantas y cuatro suites, donde cada uno de los hijos de Cristiano contaría con un amplio espacio para vivir.

La construcción contará con 1.957 metros cuadrados y tendrá todo tipo de detalles: una sala de cine, despacho, zona de servicio, una pista de tenis y dos garajes, entre otras cosas. Además, instalarán paneles solares para apostar por un modelo sostenible.

En su interior habrá mármol italiano y grifos de oro macizo y se instalará un sistema de calefacción inteligente y un mural de la marca Louis Vuitton, hecho a medida para adornar la nueva propiedad de CR7.

Los vecinos no están contentos con el nuevo capricho de Cristiano Ronaldo

No le ha sido fácil arrancar este proyecto a la famosa pareja. Al aumento del presupuesto y la extensión de los plazos de construcción en el inicio de las obras, hay que sumarle el descontento de los vecinos, que no estarían muy felices de tener que soportar otro año más de obras hasta que la lujosa mansión esté finalizada.

“A la casa le queda al menos un año más de obras. Estamos hartos. Llevamos 3 años de obras. La casa es tan grande que parece un hospital. Mi calle lleva cortada meses, mi jardín lleno de polvo. Todo por culpa de la ‘pirámide’ del faraón Ronaldo”, comentó un vecino molesto a Ok Diario.