Dani Alves conoció el jueves la condena de cuatro años y seis meses de prisión decretada por el juez tras el delito de agresión sexual que cometió sobre una joven. La sentencia será recurrida por ambas partes en los próximos días. La abogada del brasileño lo anunciaba unos minutos después de que la decisión del juez fuese anunciada. Y posteriormente lo hacía la abogada de la víctima.
A pesar de que la víctima está contenta, porque “por fin me han creído”, Esther García ha anunciado que la acusación recurrirá la sentencia al considerarla “mínima”. “Desde un punto jurídico debe recurrirse”, expresaba la letrada.
García desveló en sus declaraciones posteriores a la publicación de la sentencia la delicada situación en la que la joven agredida llegó al juicio, “muy frágil y medicada”, debido al “infierno” en el que ha vivido desde la noche en la que se encontró con el futbolista. Recordó en declaraciones a Catalunya Radio que su cliente incluso le llegó a decir "me han vuelto a violar" cuando se difundieron imágenes que desvelaban su identidad.
La abogada reconoció que esta pena es la más baja que ha visto su despacho de abogados “en más de 20 años”. Ha denunciado que la condena de cuatro años y medio “no se legitima ni se puede legitimar con la última reforma del Código Penal en esta materia”, en referencia a la ley "solo sí es sí".
De igual manera, apuntó que uno de los motivos principales para recurrir la sentencia es la intención de que se revoque la atenuante de reparación del daño. Bajo su criterio, no corresponde en esa situación ya que “no ha habido ningún esfuerzo económico ni moral” por parte del condenado para resarcir a la víctima de los daños causados.
Ante la oleada de informaciones que han salido durante todo el proceso y el complicado estado psicológico de la víctima, la aboga le prohibió tener acceso internet. La joven disponía de un móvil antiguo sin acceso a las redes sociales y tampoco veía la televisión. Pero la información le ha seguido llegando igual, algo que no ha beneficiado a la víctima.