Pecco Bagnaia y el gesto de caridad con su pareja: darán las ganancias de su boda a un Hospital de Turín

Pecco Bagnaia está atravesando por uno de sus mejores momentos. A nivel deportivo y, sobre todo, a nivel personal. Hace pocos días, en el Gran Premio de Alemania, el piloto italiano de Ducati recuperó el liderato del Mundial de MotoGP. Una posición que no alcanzaba desde la primera carrera de la temporada en Qatar. Tras superar ese primer Gran Premio, Jorge Martín empezó a ser mucho más constante y cometió muy pocos errores. Sin embargo, desde que Bagnaia empezó a ganar en Montmeló, su racha ha sido envidiable. Con la última victoria en Sachsenring, ya acumula cuatro triunfos seguidos. Algo muy complicado de hacer en MotoGP. Al logrado en Alemania, toca sumarle el mencionado de Montmeló, Mugello y Assen; antes, además, también había ganado en Qatar y en Jerez. Por no contar las dos sprint que también tiene en el bolsillo. En definitiva, Bagnaia está con la flechita para arriba.

"Me pongo un 9 en esta primera parte de la temporada. He tenido algunos errores. Me caí en Portimao con Marc y en Barcelona cuando iba en cabeza. Lo peor fue la caída de Barcelona cuando iba liderando con nueve décimas de ventaja. Por eso un 9 y no un 10. Ya llevo seis Grandes Premios con esta inercia. Hacemos un trabajo perfecto cada fin de semana. Hemos ganado cuatro carreras consecutivas. No creo que vaya a cambiar demasiado para Jorge. Tenemos 10 puntos de diferencia y el campeonato sigue siendo muy largo. No es el momento de pensar en puntos de inflexión, queda mucho campeonato", destacaba el italiano en Alemania.

Suenan las campanas de boda para Pecco Bagnaia

Más allá de lo puramente deportivo, este parón veraniego será muy importante para Pecco Bagnaia. Intentará descansar lo máximo posible, pero su boda con Domizia Castagnini puede dejarle en una situación peculiar. Aún así, con tres semanas por delante, el piloto italiano tendrá tiempo para absolutamente todo. Hasta por pasar por el altar: concretamente el próximo 20 de julio.

Una boda, la de Bagnaia y Castagnini, que tiene una peculiar intrahistoria. Los italianos han decido donar todas las ganancias de su boda -en regalos y demás- a un Hospital de Turín. El objetivo no es otro que aportar un granito de arena y ayudar a la creación de un gimnasio de rehabilitación para los niños que están hospitalizados. Así lo ha confirmado Franca Fagioli, la Directora del Departamento de Patología y Cuidado Infantil del Hospital Regina Margherita de Turín.