Cuestionado por lo más desagradable de lo vivido, el jerezano ha apuntado: ""Lo más desagradable fue el momento que pasó mi pareja y mi niña, que estaban dentro del coche. Unos sinvergüenzas se acercaron a tirar piedras, botellas y de todo. Entiendo el enfado. Es muy normal. Estamos en una situación que este equipo y este club no se merecen. Incluso pienso que no merecemos estar ahí con lo que hemos hecho. Lo único que nos queda es arrimar y sacar esto adelante".
Bruno ha relatado lo sucedido: ""Están diciendo muchas mentiras y encubriendo a los personajes que vinieron a buscarnos. Llegamos el equipo entero y nos bajamos del autobús. Tres o cuatros cogimos los coches rápido. Había seis o siete que estaban esperando. Lo que no esperábamos era la bajada del autobús de toda esta gente. Cuando vi a mi pareja y a mi niña en el coche intenté irme lo antes posible porque estaban ellas dos. Cuando nos íbamos a ir lo que hicieron fue cerrar la verja y no podía ni mover el coche. Lo del acelerón hay que borrarlo porque es imposible. Tato pudo salir pero no pudo meter el acelerón. Además Tato no conducía. A mí me tiraron una botella, dos o tres patadas al coche y al resto de compañeros igual. A Lucas le partieron la luna trasera con un pedrusco enorme. Le tiraron otro a la parte delantera y de haberse roto le hubieran hecho algo a Lucas y Marcos. Lo mismo le pasó a Ruz, que estaba con Iago. Después un grupo se quedó con algunos que no llegaron a las manos. Esa gente por lo menos intentó hablar y no quedó en nada. Esto no es cosa de tres o cuatro, es de muchos más".