El Xerez juega a competir en El Madrigal

Carlos Tur IIIEs tarde para que el Xerez compita, aunque el conjunto azulino se está aficionando, ya sin presión, a poner en aprietos a los equipos que se juegan el ascenso. En Montilivi venció al Girona hace dos semanas y este lunes, en El Madrigal, al menos ha sido capaz de meterle el miedo en el cuerpo al Villarreal, que acabó venciendo 3-2.

Y eso que el conjunto amarillo jugó en inferioridad numérica desde el 38. En ese minuto, Canteros fue expulsado por una brutal entrada sobre José Vega, y el partido cambió por completo. El Xerez había estado sometido desde el inicio, no sólo debido al temprano gol de Bruno, que abrió el marcador en el 8, sino, especialmente, al sentirse ahogado por el juego combinativo en ataque de los de Marcelino García Toral, expulsado también tras protestar la anulación de un tanto. Polémica decisión arbitral, por cierto.
Tras el descanso, llegaron los mejores minutos para el Xerez, que encontró en Bodipo un filón. El de Dos Hermanas comenzó a rematarlo todo hasta que, después de dos serios avisos, encontró el gol en el 65. El delantero aprovechó para anotar un buen centro del recién incorporado Álvaro Rey.
El Villarreal necesitaba los puntos para ocupar la segunda plaza, que permite ascender directamente, y lo cierto es que, con uno menos y tras el empate, se sintió nervioso. Eso sí, reaccionó e hizo intervenir a Toni, que, como en las semanas previas, volvió a aparecer con éxito. Y al final encontró el gol a balón parado, como anotó el primero y tanto sufre el Xerez, merced a un tanto de Mellberg que hizo estallar de alegría a los castellonenses, sabedores de lo importante que resultaba ganarles a los de Carlos Ríos.
Uche fue un peligro constante para la zaga azulina. El delantero nigeriano estuvo muy activo y, pese a que no había encontrado el premio del gol en sus habituales intentos a lo largo del partido, fue él quien sentenció al Xerez en el 89 con una diana a placer. El mérito de la jugada, en este caso, fue de Jonathan Pereira. No obstante, los xerecistas generaron la incertidumbre local gracias a un bonito e inmediato tanto de Bodipo, de nuevo de cabeza tras un preciso pase desde la izquierda de Redondo. Y lo intentaron en el descuento, pero ya sin más que decir.