Gabriel Galán III GerenaEl Xerez ha sumado este domingo en Gerena su cuarta jornada sin perder tras sumar un merecido punto pocos días antes del partido del año para la entidad. Un empate a cero que no vale de mucho en la clasificación, pero que sí deja claro que el equipo de Puma está preparado para ganarle al Lleida.
Y es que los azulinos jugaron mucho tiempo con el freno de mano puesto, con un ojo en el Gerena y el otro ya en la Copa. Quizás esa falta de decisión le impidió asustar más a un rival distinto a lo que se puede ver en Tercera, ni mejor ni peor, pero con una forma de jugar elogiable, con las ideas claras, mucho toque y muy veloz. Eso sí, sin mucha presencia en el área rival y poco gol.
Esa falta de puntería sí le vino bien al Xerez, sobre todo al inicio del encuentro, donde el Gerena se quedó con la miel en los labios. Sobre todo en un balón que Kiki mandó al travesaño, y posterior bote sobre la línea, cuando todo el estadio ya cantaba gol. Incompresible el error, a puerta vacía, una dosis de moral que recogió el Xerez para no salir desaborlado de Gerena.
Porque los azulinos, con una marcha menos de lo habitual, salieron dormidos hasta que Puma decidió cambiar el ritmo. A los 16 minutos, Nico sustituyó a Fran Pineda, una especie de castigo por no ejecutar sobre el terreno de juego lo que el técnico había pedido durante la semana. El Gerena, con el capitán Tore al mando, y dos balas (Chuli y Kiki) por las bandas, sabía cómo crear peligro ante la meta de Javi Muñoz, que estuvo muy atento durante todo el encuentro.
Con el choque más relajado, el Xerez sí creyó que alguna vez podría robar el balón en la emocionante, elogiable y a la vez peligrosa salida de juego del Gerena. Iván Aguilar tuvo un par de ocasiones claras, pero no fue la mañana del delantero azulino, que gastó muchas fuerzas en ayudar a los compañeros.
Y con esa relativa tranquilidad, apareció el colegiado para que saltaran chispas. En una falta lateral, Ramos Rodríguez paró el choque por una posible agresión de Fran Ávila, que uno de sus asistentes vio pero que al final se quedó en nada. Y mucho dejar jugar que al final se le fue en su contra.
Tras el descanso, el Xerez apretó más, incomodó a un Gerena con menos fuelle y que no se encontraba cómodo sin su forma de juego, pero le faltó más presencia arriba y definición. Los cambios igualaron el encuentro, Puma volvió a ser expulsado por protestar, al igual que Sousa. También pudo ser expulsado el central Óscar, que detuvo como pudo a Iván Aguilar para evitar que se quedara solo delante de Pedro. Ni el árbitro ni su asistente vieron la falta.
José Juan Romero, técnico local, comprobó que la única forma de sorprender a una entonada defensa visitante era con balones largos sobre el recién salido Iván. Javi Muñoz, siempre bien colocado, frenó los ataques del extremo local, al que Jairo, que se estrenaba en el Xerez, también paró como pudo.
Ya con diez, al Xerez se le hicieron eternos los últimos minutos, pero aguantó el tipo. Quizás le faltó una marcha más para ganar en Gerena, la que hará falta, incluso alguna más, para pasar de ronda ante el Lleida. Ese día, este miércoles, el Xerez se jugará mucho. Más que en Gerena, donde cogió el punto como agua de mayo. En la Copa solo vale ganar.