Una medida con la que se pretende apaciguar un poco la guerra que hay montada entre ambas instituciones y que tiene al equipo de Puma disputando sus partidos, e incluso ya hasta los entrenamientos, en el exilio de Medina. Una situación que ya ha dejado sus consecuencias en el encuentro ante La Palma, ya que la semana no ha sido la más idónea para preparar un partido.