Román espera un choque complicado a pesar de los numerosos problemas, deportivos y económicos, por los que atraviesa el conjunto xerecista: "Es un partido clave para nosotros si queremos luchar por el play-off. Y también para ellos, que tienen en su mano lograr la salvación. No están tan lejos como parece y en cualquier momento te pueden sorprender. Además, cuando no se gana, más ganas se tiene de ganar".
El entrenador sevillano conoce la situación extradeportiva azulina y confía en una pronta solución: "Si se arregla lo dentro, el equipo tirará hacia arriba. También influye mucho el vaivén de futbolistas. En la primera vuelta, aunque eran otros jugadores, tenían muchos problemas y nos ganaron en casa cuando éramos líderes. Pasarán dirigentes y jugadores, pero el escudo del Xerez siempre quedará".