Jesús López, portero improvisado y en la agenda de Blackburn y Newcastle
Ésa es, al menos, la promesa que le ha hecho un agente futbolístico, que ha quedado en llamarle en las próximas horas. "Estoy esperando una llamada porque, en principio, me voy el lunes con mi padre. Estoy muy ilusionado con esta posibilidad, está claro, pero tengo claro que todo se lo debo al Xerez porque si hay clubes interesados en mí es por lo que he hecho aquí. Tengo permiso del Xerez para viajar y no habrá ningún problema. Me han dicho que serán cinco días".
Jesús acaba de cumplir 18 años y espera dar el salto en este momento para dedicarse a lo que más le gusta, pero no pierde la perspectiva de las cosas: "Es lógico que esté con muchas ganas de que me salgan bien las cosas, pero sé que antes de nada lo importante es tener unos estudios. Yo me quiero dedicar al fútbol, pero ahora mismo estudio segundo de bachillerato y me gustaría hacer una carrera. Me gustaría fisioterapia o algo relacionado con educación física".
De la experiencia de ponerse de portero dice que "fue algo provocado por el hecho de que estaba muy cansado. Ya le había pedido el cambio al entrenador un par de veces y la otra opción era que se pusiera Alberto, que había entrado de refresco".
Ahora está pendiente de esa llamada que le haga dar un salto en su vida, pero por el momento está centrado en jugar el domingo: "Yo quiero estar con el Xerez hasta el último momento porque sé lo que nos jugamos. Si el entrenador quiere, ahí estaré".