Un desencuentro de Pep Guardiola, entrenador del Bayern de Múnich, Pep Guardiola, con la mujer que actuaba de cuarto árbitro en su partido ante el Borussia Mönchengladbach, ha encendido una polémica e todo el país al considerar una actitud machista del técnico catalán.
Guardiola, enfadado por la actuación arbitral, fue demasiado efusivo con Bibiana Steinhaus, que ejercía su labor en la banda, a la que forzó incluso al final del choque a darle la mano, sacudiéndole el brazo con excesiva fuerza.
Todo ello en un partido en el que el Borussia Mönchengladbach y el Bayern empataron a cero goles en un duelo táctico de alto vuelo, en el que se confrontaron dos estilos diametralmente opuestos y en el que ambos equipos pudieron llevarse la victoria. La apuesta de cada equipo fue clara desde el comienzo y respondía las expectativas que había antes del partido. El Bayern, sin el lesionado Arjen Robben y con Franck Ribery en el banquillo, apostaba por la posesión del balón, por tenerlo en la mitad contraria y tratar de llegar a la portería de Yann Sommer haciéndolo circular, para tratar de abrir espacios. El Gladbach, por su parte, optó por dejar jugar al Bayern en el centro del campo, procurando cerrar el área y buscando esporádicamente salidas de contragolpe. Al término del primer tiempo, el saldo de esa confrontación de estilos era una ocasión clara para cada equipo. La del Bayern la tuvo David Alaba en el minuto 10, con un disparo al poste. La del Gladbach, llegó en el 33 en un contragolpe comandado por André Hahn que lanzó un gran centro para Max Kruse que, estorbado por Rafinha, remató desde una buena posición pero demasiado débil y al cuerpo del meta bávaro Manuel Neuer. En cuanto a dominio territorial y posesión de balón -un 75 por ciento- la superioridad del Bayern era clara. Sin embargo, los equipos se fueron al descanso con 0-0. La primera ocasión de la segunda parte fue para el Gladbach, en un contragolpe comandado por Kruse que se cerró con un remate de Hahn ante el que Neuer tuvo que reaccionar con una buena parada. Más tarde, en el 58 y en otro contragolpe, Neuer tuvo que volver a salvar al ganarle un mano a mano a Patrick Hermann. El Bayern, que seguía monopolizando la pelota, también tuvo en esa fase del partido dos buenas llegadas, en los pies de Robert Lewandowski y el español Juan Bernat. Sin embargo, si algo había cambiado en el partido era que el Gladbach era más peligroso . En el 66, un cabezazo de Álvaro Domínguez pasó por encima del larguero y, un minuto después, Neuer tuvo que desviar a saque de esquina una falta lanzada por el brasileño Raffael. Con el Bayern en medio del partido más difícil que le ha tocado en lo que va de temporada, Pep Guardiola optó por mover el banquillo. Ribery entró por el brasileño Rafinha y el peruano Claudio Pizarro por Thomas Müller. El partido siguió en la misma tónica con llegadas para ambos equipos, aunque con intervenciones claramente más decisivas de Neuer que las de su homólogo Yann Sommer. Al final, el partido acabó con el empate que hace que el Bayern siga como líder con el Gladbach segundo con cuatro puntos menos y empatado en puntos con el Wolfsburgo y el Hoffenheim.