El jugador del Liverpool, Adam Lallana, inmerso en una producción del videojuego Assasin's Creed, participó en lo que parece un truco en el que golpea la pelota y la coloca en la capucha de un aficionado presente.
Lallana, que llegó este verano al Liverpool procedente del Southampton tras una temporada espectacular, es el protagonista del truco en el que nos preguntamos si hay algo de montaje o de verdad hace lo que vemos en el vídeo.
En lo que parece un estudio fotográfico y en lo que parece una situación totalmente improvosada el "actor" Lallana toma el esférico y coloca a uno de los presentes con la capucha abierta, para que, poco después, con un simple toque, lo coloque en la capucha. ¿Ficción o realidad?