Dos goles del delantero Saido Berahino acabaron con la racha de dieciséis jornadas seguidas sin conocer la derrota del Chelsea, que cayó hoy por 3-0 ante el West Bromwich en un encuentro en el que jugó con un hombre menos durante más de sesenta minutos por la expulsión de Cesc Fábregas.
El internacional español vio la tarjeta roja directa a los 29 minutos, tras dar un pelotazo en la cara a un rival con el juego detenido.
Una expulsión que agravó los problemas de un Chelsea en el que hoy reapareció el delantero hispano-brasileño Diego Costa y que desde los 9 minutos marchaba por detrás en el marcador, tras el primer gol de Saido Berahino.
El internacional sub 21 inglés, al que en los últimos días se le ha señalado como uno de los posibles objetivos del Chelsea para la próxima temporada, firmó también en el arranque de la segunda mitad el 2-0 para el West Bromwich al transformar un penalti cometido sobre él mismo por el defensor John Terry.
Trató de reaccionar el Chelsea, que tuvo la oportunidad de acercarse en el marcador con un remate a los 56 minutos del francés Loic Remy que se estrelló en un poste, pero el norirlandés Chris Brunt, en el 60, estableció el definitivo 3-0 para los locales.
Fue la tercera derrota del curso para los de Jose Mourinho, que, con el título de Liga ya asegurado hace varias jornadas, no desaprovechó la ocasión para dar minutos a jóvenes como el centrocampista Ruben Loftus-Cheek, que formó parte del once inicial, o el delantero Izzy Brown, piezas básicas en el triunfo del Chelsea en la última edición de la Liga de Campeones juvenil.