El Sevilla pugnará el miércoles frente al Dnipro ucraniano por su cuarto título de la Liga Europa -antes Copa de la UEFA- en un estadio que ya conoce, pues hace tres años jugó un amistoso en el Nacional de Varsovia ante el Legia, como ensayo previo a su inauguración antes de la Eurocopa de 2012.Ese encuentro lo ganó 0-2 un Sevilla muy cambiado respecto al actual y se disputó el martes 17 de abril de aquel año como prueba y puesta a punto del Estadio Nacional de Varsovia (Stadion Nadorowy), que dos meses antes se había inaugurado con un amistoso entre las selecciones de Polonia y Portugal que acabó 0-0.
Tres años y algo más de un mes después, pero en unas circunstancias radicalmente distintas, el equipo sevillista regresa ahora a ese moderno estadio de la capital polaca para disputar su cuarta final de la segunda competición europea, la segunda consecutiva, y defender el título al ser el vigente campeón.
El Sevilla, entonces entrenado por José Miguel González 'Míchel', llegó a ese amistoso contra el Legia de Varsovia tras haber caído goleado el día antes en Getafe (5-1) en la Liga, en una temporada en la que acabó noveno y no se clasificó para Europa.
Plagado de jugadores del filial, el conjunto blanquirrojo venció al Legia con dos tantos del senegalés Babá Diawará, que no triunfó en el club hispalense y ahora está cedido en el Getafe, tras sendos pases del canterano Luis Alberto Romero, quien, tras su cesión por el Liverpool inglés, ha estado esta campaña en el Málaga.
De los que jugaron dicho amistoso en la capital polaca sólo sigue en el Sevilla el lateral izquierdo Fernando Navarro, uno de sus capitanes, aunque también continúa en la plantilla el extremo José Antonio Reyes, si bien en aquella fecha estaba lesionado.
Míchel alineó a Javi Varas; Morales, Deivid, Cala, Fernando Navarro; Tom De Mul, Rakitic, Trochowski, Campaña; Negredo y Babá, mientras que salieron como suplentes el meta Julián, Samu, Atienza, Jozabed, Salva, Alberto Moreno, Luis Alberto e Hiroshi.
Con una inversión superior a los 500 millones de euros, el moderno estadio varsoviano empezó a construirse en 2008, se concluyó en 2011 y con varios meses de retraso fue inaugurado con los amistosos citados (Polonia-Portugal y Legia-Sevilla) en 2012 para la Eurocopa de Polonia y Ucrania, que finalmente ganó España.
Con capacidad para 58.500 espectadores -56.070 para la UEFA-, es sede habitual de la selección polaca y se edificó donde estaba el Estadio Décimo Aniversario construido durante el comunismo (1955), en la orilla oriental del río Vístula, cerca del centro de Varsovia.