El FC Barcelona cuenta con 109.637 socios con derecho al voto en las elecciones del próximo 18 de julio, en las que, hasta ahora, seis precandidatos aspiran a la presidencia del club, para lo que necesitarán 2.534 firmas.Este censo es de vital importancia ya que, a pesar de haber más de 140.000 asociados, solo los que tengan derecho a voto, según establece el artículo 48.3 punto 2 apartado b, podrán dar apoyo a los precandidatos, que necesitarán reunir 2.534 firmas para convertirse en candidatos y afrontar la campaña electoral en la última semana antes de la votación.
Este punto de los estatutos dice lo siguiente: "El socio que firme un boleto de apoyo deberá estar incluido en el censo electoral definitivo aprobado por la Junta Electoral, elaborado de conformidad con lo establecido en el artículo 47.1. En este sentido, estarán incluidos en el censo electoral definitivo y, por lo tanto, podrán firmar un boleto de apoyo, aquellos socios que reúnan las condiciones para ejercer el derecho al sufragio activo el día de las elecciones".
Hasta la fecha, seis socios se han postulado para entrar en la lucha por la presidencia: los expresidentes Joan Laporta y Josep Maria Bartomeu, el exdirectivo Toni Freixa, los excandidatos Agustí Benedito y Jordi Majó y el socio Jordi Farré.
A partir del próximo viernes, 19 de junio, todos ellos deberán disponer, si la comisión gestora agiliza los trámites, de las papeletas para empezar a recoger apoyos entre los socios, con un inconveniente en estas fechas, ya que no podrán acudir al Camp Nou en un día de partido y aprovechar la afluencia de socios.
Este vez, con las elecciones fuera del calendario deportivo, las 2.534 firmas se presentan como un gran obstáculo, que solo podría quedar matizado si los aspirantes reciben de la junta gestora las papeletas cuanto antes y si ésta permite que en el partido o partidos que el Barça pueda jugar en el Palau, en la final de la ACB, los precandidatos pueden montar sus tenderetes para solicitar las firmas de apoyo.
El día 4 de julio es la fecha tope que el calendario electoral establece para que los aspirantes entreguen las firmas, antes de iniciarse el periodo de comprobación para poder establecer quiénes se convertirán en candidatos e iniciarán la decisiva campaña electoral en la última semana, en la que los debates televisivos y radiofónicos cobrarán mucho interés.