Paraguay, un guerrero extenuado
La selección de Paraguay ha sacado en limpio en esta Copa América la recuperación de su tradicional garra, pero el desgaste físico que ello ha supuesto en una plantilla veterana sacó a relucir las limitaciones del cuadro guaraní.Manuel Pérez Bella
La goleada por 6-1 sufrida ante Argentina fue en parte consecuencia del descomunal esfuerzo que hizo en los cuartos de final para abrumar a Brasil, y del escaso tiempo del que dispuso el equipo para recuperarse, según reconocieron los propios jugadores.
"Nos costó jugar, el desgaste físico es muy importante", dijo el medio Raúl Bobadilla después de las semifinales contra Argentina y, aún así, Paraguay "nunca dejó de correr" en los noventa minutos, según apuntó Édgar 'Pájaro' Benítez.
Algunos de los más veteranos de la plantilla de Paraguay, como Roque Santa Cruz (33 años), Paulo da Silva (35), Justo Villar (38) o Nelson Haedo Valdez (31) han sido fijos en la competición y el físico les ha pasado factura.
La fatiga se unió a las lesiones de Derlis González y Roque Santa Cruz, que engrosan una enfermería en la que ya estaba Néstor Ortigoza, lo que complicará a la Albirroja ante Perú en el partido del tercer y cuarto puesto, que se juega este viernes.
Para ese partido, Paraguay volverá a tener muy poco tiempo para recuperar el aliento y, de nuevo, contará con 24 horas menos que su rival, que jugó las semifinales el lunes.
El despliegue físico de Paraguay ha sido un factor determinante en sus mejores partidos, desde la noche de su debut cuando remontó dos goles a Argentina (2-2) o en los otros empates contra Uruguay, en la primera fase, y Brasil en cuartos.
Pero con la pólvora mojada, aparecieron las debilidades de un equipo con escaso volumen de juego, que carece de pase en corto y que casi siempre se ve impelido a las jugadas aéreas para hacer daño a sus rivales.
De los cuatro semifinalistas, Paraguay es con diferencia el que menos pases realizó en toda la Copa, 1.169, menos de la mitad que Chile o Argentina, y es el que tiene un peor porcentaje de aciertos (71,4 %).
La consigna en el vestuario tras la derrota de semifinales es "levantar la cabeza" y recuperarse para el partido contra Perú.
"Nos vamos con la cabeza arriba. Nadie daba un peso por nosotros y llegamos a las semifinales. Ahora queremos quedar en tercer puesto", dijo Raúl Bobadilla.
El lateral izquierdo Miguel Samudio, con la mente ya más adelante, valoró que la derrota sirve de "experiencia" para las eliminatorias del Mundial, a las que el equipo llegará con la moral reforzada y con más crédito después de su papel en la Copa América.
Paraguay se quedó fuera del Mundial de Brasil y fue el peor en las eliminatorias sudamericanas, un resultado que aún cuesta digerir después de haber jugado cuatro mundiales seguidos, de 1998 a 2010.
Para lograr un billete a Rusia y para hacer un buen papel ante Perú este viernes, la Albirroja ya sabe que sus opciones dependerán en gran medida de que mantenga la garra, la actitud y competitividad por los que acabó entre los cuatro mejores de la Copa América.
Pero el equipo también deberá de empeñarse en mejorar su juego y echar mano de su nuevo talento destapado en este torneo, Derlis González, porque se ha visto que las fuerzas de los guerreros guaraníes tiene un límite.