Albania, entre la sed de triunfar y el temor a choques en partido con Serbia

Los albaneses se debaten hoy entre el sueño de lograr una victoria histórica contra la selección serbia de fútbol y la pesadilla de que se produzcan los temidos incidentes que podrían arruinar las aspiraciones de clasificación de su equipo en la Eurocopa 2016.Mimoza Dhima
Las dos selecciones se enfrentarán esta noche a las 20.45 hora local en la ciudad de Elbasan, a unos 40 kilómetros de Tirana en un partido con elevada carga política.
Ambos equipos juegan en el primer grupo, pero mientras que los serbios, con tan solo un punto en su haber, están ya desclasificados, el equipo albanés puede aspirar todavía a ir a Francia, ya que ocupa el tercer puesto con 11 puntos, solo uno menos que el segundo, Dinamarca.
El partido ha sido considerado por la UEFA de máximo riesgo debido al problemático pasado histórico entre ambos países balcánicos y las tensiones políticas por la guerra de Kosovo, una antigua provincia serbia poblada mayoritariamente por albaneses étnicos que se independizó unilateralmente en 2008.
Por este motivo la UEFA ha enviado a dos oficiales de seguridad, uno más de lo normal, que acompañará al equipo serbio, mientras ha prohibido la presencia de hinchas serbios en las gradas.
Para garantizar la seguridad de los jugadores serbios y la tranquilidad en el campo, la policía ha elaborado un plan detallado de medidas drásticas y ha desplegado a 2.300 efectivos.
Desde la una del mediodía hasta las cinco de la tarde permanecerá cerrada al tráfico la carretera nacional que une la capital con Elbasan, donde desde las primeras horas de la mañana se han concentrado ya centenares de aficionados llegados también desde Kosovo, Macedonia, Estados Unidos, Suiza o Alemania, entre otros países.
Desde esta mañana, la ciudad vive un ambiente festivo, repleta de jóvenes vestidos con camisetas rojas de la selección albanesa que marchan por las calles al coro de "Albania Albania, ¡qué bueno es ser albanés!".
Dos helicópteros militares sobrevuelan desde el miércoles esta ciudad, mientras que los policías se han hecho fuertes en las terrazas de los edificios situados en los alrededores del estadio "Elbasan Arena".
"Tirana y Elbasan están paralizados. Estas medidas no las hemos visto ni durante la visita del Papa el año pasado", dijo a Efe Fatmir Kadiu, un aficionado de fútbol.
Pero a Arjan Mara estas medidas no les parecen exageradas cuando se trata de un "vecino con el que no hemos hablado durante casi 70 años y que cuyo único propósito hoy es provocar disturbios", igual que en Belgrado el año pasado.
"Ojalá ganemos. Hoy es un partido de vida o muerte. No espero disturbios, solo si son provocados", señaló Marjana, una estudiante de historia.
Los refuerzos policiales no impidieron que un adolescente de 14 años -detenido hoy por la policía- lograra ayer lanzar una piedra contra el autobús de los futbolistas serbios, sin provocar daños materiales, ni lesionados.
El Ministerio de Exteriores serbio se quejó en una nota de protesta de "la negligencia seria de los servicios competentes de Albania en la organización del partido", mientras que la Federación Serbia de Fútbol amenazó con boicotear el partido si se repiten incidentes de ese tipo.
Por su parte, el primer ministro albanés, Edi Rama, expresó su pena por el incidente que indica que el "peligro del nacionalismo, el odio y la exclusión está aún presente entre la nueva generación".
Rama declaró hoy en una ceremonia de recepción de un grupo de 50 alumnos serbios, que asistirán al partido, que más importante que el la victoria en el campo es el "triunfo de la imagen, del civismo y de la tradicional hospitalidad albanesa".
Pese a la invitación de Rama, su homólogo serbio, Aleksandar Vucic, no estará hoy en las gradas del estadio, para posibilitar que "el factor principal sean los deportistas".
La policía albanesa arrestó ayer a Ismail Morina, el supuesto lanzador de un dron con símbolos nacionalistas albaneses en el campo de Belgrado durante la partida de ida, hace un año, un incidente que desembocó en enfrentamientos entre jugadores e hinchas y que causó tensiones entre los políticos de ambos países.
El partido fue suspendido y el Tribunal de Arbitraje Deportivo dio la victoria a Albania 3-0.