Emery cree que han sido "justos vencedores" en "un partido difícil"

El entrenador del Sevilla, Unai Emery, dijo tras ganar 2-1 al Málaga que, aun sin hacer "un buen juego", han sido "justos vencedores" en "un partido difícil", por lo que se mostró "contento porque el equipo ha competido" ante un rival "que venía en racha" y "satisfecho" de empezar bien la segunda vuelta."Ya dije que no era un partido fácil. El Málaga estaba en racha, encaja muy pocos goles y compite muy bien, y mantener nuestra inercia de situaciones positivas en casa nos requería mucha exigencia, más atendiendo al momento del rival y después de quizás cierta euforia que nos podía hacer creer que era más fácil", afirmó.
El técnico sevillista indicó que, tras el 2-0, en el inicio del segundo tiempo tuvieron "dos o tres ocasiones buenas de gol", aunque no las concretaron, "ellos se metieron en el partido y el 2-1 generó "incertidumbre al estar el marcador más ajustado".
Sobre las quejas del Málaga al considerar que hubo un codazo de Vitolo sobre Boka en la acción previa al 2-0, indicó que "es difícil sacar la puntilla a decisiones arbitrales", pero no cree "que sea falta, es una disputa, Vitolo no hace ademán de darle al rival, protege el balón, se gira y en el cuerpo a cuerpo choca con Boka".
Admitió que no estuvieron "tan fluidos en el juego", porque el Málaga "presiona mucho y tienes que buscarles la espalda, pero el Sevilla se ha sabido adaptar a lo que rival ofrece y hacerle daño", y añadió que aunque "hay cosas que mejorar", está "satisfecho" por la victoria y también por que han sabido "sufrir".
"No era fácil jugar con soltura. Era un partido difícil, pero este guión lo hubiese aprobado antes, ganar sin jugar bien, era un día para arrimar el hombro y había que sacar el partido", recalcó Emery, que destacó que "hay que dotar al equipo de confianza" y en esa línea Kevin Gameiro, con sus dos goles, la está teniendo.
A su juicio, "lo bueno es que tenga ocasiones, su racha es buena", si bien también avanzó que también dará confianza y minutos a sus otros dos delanteros, Fernando Llorente y Juan Muñoz.
El guipuzcoano valoró "el gran esfuerzo y el nivel de presión" de su equipo para ponérselo "difícil" al Málaga, aunque sabían que "el segundo tiempo se iba a hacer largo porque iban a apretar y son un equipo que compite muy bien", con lo que "había que defender bien".
"Tenemos ilusión en la Liga para ir subiendo posiciones y también en la Copa, ahora viene el Mirandés, y hay capacidad para ilusionarnos y hacer cosas en las tres competiciones que jugamos. Tengo gran confianza en todos los jugadores y buscar el rendimiento con la plantilla al completo, que todos participen", aseveró.
Sobre posibles refuerzos, dijo que "si el mercado está abierto y surge esa posibilidad, el Sevilla va a estar presente y esa opción no se cierra", al estar "abiertos a lo que pueda venir para ayudar, pero no es fácil", y reconoció que la asignatura pendiente sigue estando fuera de casa, pero que mira "siempre hacia adelante".