El Athletic Club debutó este miércoles en la Liga de Campeones Femenina de fútbol al ataque y dejando una buena imagen ante un equipo muy poderoso, el Fortuna Hjorring danés, quinto con mejor ránking UEFA de los 32 equipos en dieciseisavos de final de la mejor competición europea por clubes.Ramón Orosa
El equipo de Joseba Agirre logró un resultado (2-1) que le permitirá encarar con ventaja el partido de vuelta de dentro de una semana en Dinamarca, lo que ya es un logro, pero es muy ajustado y se prepara para -al menos- 90 minutos de sufrimiento en tierras nórdicas. Donde, no obstante, está seguro de poder dar réplica a un rival más que acostumbrado en estas lides si hace las cosas bien.
Así lo entiende Agirre, técnico que debutó la temporada pasada consiguiendo el título liguero y que demostró ya desde el arranque del encuentro una gran ambición incluyendo en el once inicial hasta cinco delanteras.
La posición más sorprendente fue la de la internacional Erika Vázquez, toda la vida ariete, el curso anterior media punta y contra el Fortuna incrustada en el doble pivote junto a Maite Lizaso.
Por delante, las incisivas Ainhoa Vicente 'Moraza' por la derecha y Lucía García por la izquierda, la creativa Maite Oroz en la media punta y Yulema Corres, la mejor del partido, la más avanzada.
Entre Moraza y Yulema amargaron a las danesas una segunda mitad de la primera parte en la que una espléndida jugada suya abrió el marcador; y Erika y Maite fabricaron otro precioso segundo tanto en la recta final del choque, cuando ya parecía que el físico nórdico iba a acabar imponiéndose.
No se quedó ahí la valentía bilbaína, ya que a cada cambio más delanteras sobre el césped de un San Mamés con sensación de vacío, pero con cerca de 10.000 espectadores.
Al primer percance serio, la lesión de la central izquierda Garazi Murua, Agirre respondió retrasando a Moraza, la más profunda de sus jugadores en ataque hasta entonces, y dando entrada a otra delantera, Nekane Díez, goleadora de regreso tras meses lesionada.
También se lesionó Moraza y de nuevo otra jugadora de ataque al campo, la extremo izquierda Eli Ibarra, camino de alcanzar su partido 400 como rojiblanca. Aún habría de entrar una última delantera, Irune Murua, de perfil similar a Nekane. En su caso para un relevo más natural, en los últimos minutos y para que Yulema recibiese de la grada de San Mamés una merecida ovación.
Fue el premio que se ganaron tanto Yulema como todo su equipo por el buen y valiente partido completado en un choque al ataque, con buena cara y cuyo resultado (2-1) permitirá al Athletic encarar el choque de vuelta del próximo miércoles, día 12, en el Hjorring Stadion (19:00 horas) con ilusión y opciones de estar en octavos de final. EFE.