El Barcelona recibía este sábado en el Camp Nou al Granada, colista de la clasificación, con el objetivo de no perder de vista al Real Madrid, que había ganado previamente al Alavés. Mientras, el Granada llegaba con la difícil tarea de sacar algo positivo del feudo culé.
La primera parte estuvo marcada por el control del balón por parte del Barça, aunque no tuvo muchas ocasiones durante los primeros 45 minutos. Sólo las internadas por banda derecha de Sergi Roberto parecían llevar cierto peligro sobre la portería de Ochoa.
Ya en la segunda parte, Rafinha abrió el marcador nada más comenzar tras una jugada embarullada en la que el brasileño sacó petróleo para anotar el único tanto del partido (1-0).