Iborra, en la temporada de la renovación, capitanía y su primer triplete

Vicente Iborra ha entrado en la campaña 2016-17 con buen pie, impresión que se empezó a ratificar cuando formó parte del elenco de capitanes de la plantilla del Sevilla, renovó su contrato el pasado verano hasta 2020 y el domingo consiguió el primer 'triplete' de su carrera profesional.Antonio Gutiérrez
El valenciano cumplirá 29 años el próximo enero en su cuarta temporada como sevillista tras ser contratado procedente del Levante, su club de toda la vida, en el se formó y con el que debutó en Primera División.
Iborra tuvo mucho protagonismo en los tres cursos que el Sevilla fue dirigido por Unai Emery, quien lo utilizó desde su puesto habitual de centrocampista, a ponerlo en ocasiones como central y delantero centro.
Su fortaleza física y altura (1,95 metros de estatura) le hace batallar en todas las zonas de campo e ir muy bien por alto, algo que aprovechó Emery, con el que marcó veintidós goles en entre todas las competiciones y jugó 128 partidos con tres títulos de campeón de la Liga Europa en su currículum.
El protagonismo de Iborra despertó el pasado agosto el interés de fútbol inglés y el Sunderland ofreció un suculento contrato para que se fuera la 'Premier', pero el jugador se lo pensó y siguió en el Sevilla, ahora con el argentino Jorge Sampaoli como entrenador.
Iborra, que en la pasada campaña llegó a ser cuarto capitán de la plantilla, en ésta, tras la marcha del equipo de José Antonio Reyes, Jorge Andújar 'Coke' o el portugués Antonio Alberto Bastos 'Beto', pasó a ser un peso más pesado aún.
Es ahora el primer capitán en un grupo en el que también están el portugués Daniel Carriço, el argentino Pareja o Víctor Machín 'Vitolo', galones que le reconoció la plantilla y también el club, que a finales del pasado septiembre le mejoró y renovó el contrato hasta 2020.
El valenciano, reconocido por sus compañeros y querido por la afición, lleva en esta campaña veinte partidos con Sampaoli entre todas las competiciones, aunque en casi todos salió desde la suplencia.
Así fue este domingo en el estadio Balaídos ante el Celta, cuando el central Nico Pareja se quedó en el vestuario en el descanso por unas molestias de rodilla e Iborra ocupó su sitio.
La primera parte el partido concluyó con empate a cero y Sampaoli utilizó el recurso de que Iborra se fuera hacia arriba en las jugadas a balón parado. Así llegó pronto el 0-1, de cabeza, rodeado de rivales y a la salida de un córner.
Iborra puso la tranquilidad en los sevillistas cuando en el minuto 84, ahora en una jugada en la que ejerció de delantero centro, controló bien un pase de un compañero dentro del área para meter el balón con habilidad pegado a un palo.
Ya con la victoria en el bolsillo, en la prolongación del partido se pitó un penalti sobre el argentino Joaquín 'Tucu' Correa e Iborra rápido solicitó a sus compañero lanzarlo para tener la posibilidad del 'triplete'.
No hubo dudas, el valenciano lo lanzó y lo hizo como mandan los cánones, fuerte y ajustado a un palo, lo que le valió el 0-3 al Sevilla y a él el máximo protagonismo, tres goles en 45 minutos.