El Espanyol se ha impuesto con autoridad ante el Granada en un partido que los pericos dominaron de principio a fin y en el que apenas sufrieron ante un conjunto nazarí al que le costó generar peligro (3-1).
Se adelantaron los de Quique gracias a un gol de Reyes al comienzo del partido, pero poco después empató Andreas Pereira tras un buen golpeo de falta que coló por debajo de la barrera. Antes del desacanso, Piatti volvió a adelantar a los suyos.
En la segunda mitad, Marc Navarro puso tierra de por medio con el definitivo 3-1.