El director deportivo del Sevilla, Óscar Arias, ha admitido que negocia el regreso de Jesús Navas y Éver Banega, pero ha negado que "apostar por futbolistas de esa edad" sea "un cambio de filosofía".Sí ha reconocido, en una entrevista con EFE, que busca "jugadores que den rendimiento aunque ronden los 30 años".
Arias ha manifestado que "si funcionan, seguro que nadie se acordará de la edad" porque "ambos son conocidos, son apuestas seguras que garantizan rendimiento"; si bien ha puntualizado que "con los jóvenes ocurre exactamente lo mismo".
El sucesor de Ramón Rodríguez 'Monchi' ha señalado que "cuando la idea es encontrar jugadores de primer nivel, es más difícil encontrar los objetivos"; y eso justifica la tardanza en firmar refuerzos porque "más que la prontitud, lo importante es firmar lo que quieres" y existe "una base sólida para no acudir con prisas al mercado".
Óscar Arias, sin embargo, es consciente de la "importancia de que para la previa de la Champions", que se disputa a mediados de agosto, el Sevilla "tenga ya la mayoría del plantel a disposición del entrenador", el argentino Eduardo 'Toto' Berizzo, a quien ha calificado como "un técnico exigente".
El director deportivo ha reiterado que el Sevilla carece de "la capacidad de otros clubes para hacer esfuerzos millonarios para reforzar una determinada posición" y ha recordado que el futbolista "más caro" de la plantilla "es Franco Vázquez, que costó 15 millones" de euros el verano pasado.
"Podemos hacer algún esfuerzo similar, pero seguiremos siendo un club que busca jugadores con margen de crecimiento para ser luego futbolistas importantes. Buscamos gente del perfil de Lenglet y Correa para generar luego plusvalías", ha agregado.
Arias ha lamentado la dificultad de fichar porque cuando un club, como es el caso del Sevilla, "vende bien, el resto cree que aquí hay un cajón lleno de billetes que no se acaba nunca"; pese a lo cual intentará "seguir en la pelea de poder" equipararse "con el Atlético de Madrid y marcar distancias con los de abajo".
"El objetivo es no renunciar a nada sabiendo nuestras limitaciones. Somos muy exigentes y queremos lo máximo. En las tres competiciones queremos llegar lo más arriba posible. La Liga no es nuestra meta pero, ¿por qué no vamos a pelear con los grandes aún sabiendo que es una lucha muy desigual?", se ha preguntado.
Óscar Arias sabe que su "responsabilidad, tras la salida de Monchi, es grande pero también es un orgullo porque no es una misión al alcance de todos"; si bien ha puntualizado que deben "venir personas para que la dirección deportiva funcione como hasta ahora: habrá cambios, pero la filosofía será la misma".