No mereció tanto castigo
El Sevilla Atlético no levanta cabeza. No jugó un mal partido el cuadro de Tevenet en Almería. No obstante, al filial no le sonríe la suerte como lo hacía la temporada pasada. Además de la falta de pegada que no atesoraba la campaña anterior, en la noche de este viernes el árbitro Valdés Aller perjudicó con varias decisiones al cuadro hispalense. Pitó un penalti que no era en el 45 de la primera parte y no expulsó a Tino Costa por una grave agresión a Catalpiedra en la primera mitad. El ex del Valencia anotó el segundo tanto del partido. Morcillo de penalti, Tino Costa y Pozo sentenciaron el partido.
La primera mitad, como prácticamente todo el partido, ha transcurrido sin mayor pena ni gloria. Muy poco fútbol, con el filial sevillista intentando elaborar algo más su juego en el comienzo, pero sin demasiada profundidad, y un conjunto almeriense intentando aprovechar alguna llegada a la contra o algún disparo lejano, generalmente sin peligro.
Entre lo más destacado de un insulso primer tiempo, dos acciones por cada lado. Por el local, un centro de Nano desde la izquierda que rozó la madera y un disparo de Tino Costa que salía fuera por poco; por el visitante, una falta en la frontal botada por Carlos Fernández que atajó René en dos tiempos y un remate de Marc Gual que obligaba de nuevo a intervenir al meta rojiblanco.
Pese a todo, y a que un empate sin goles hubiera sido quizás lo más lógico, y justo, visto lo ocurrido sobre el césped en el primer tiempo, el Almería se fue al descanso con ventaja, al aprovechar una contra y forzar Pozo, en el límite del minuto 45, un penalti de Yan Eteki que Morcillo materializaría en el 1-0.
El Sevilla Atlético ha rozado el empate a balón parado en la primera acción del segundo acto, aunque el Almería, lejos de entregarle el esférico a su rival, ha querido defenderse teniendo la posesión y elaborando más el juego.
Los sevillistas, a la contra o desde lejos, buscaban una opción para equilibrar el marcador.
Con todo, la calidad del juego tampoco ha subido y, salvo algún destello de Pozo, poco fútbol se ha visto también en la segunda mitad.
En una de esas creaciones del malagueño, éste ha visto el desmarque de Pervis Estupiñán por la izquierda y el centro del ecuatoriano lo ha rematado en el segundo palo, de cabeza y a puerta vacía, Tino Costa para hacer el 2-0 que dejaba prácticamente sentenciado el partido a un cuarto de hora del final.
El propio Pozo ha vuelto a aparecer en los últimos instantes del tiempo de descuento para batir por bajo a Caro y redondear la victoria rojiblanca.