Aguas revueltas las que corren por la RFEF tras el sonado caso de corrupción que manchó a varios integrantes de la organización con Villar a la cabeza. En este caso, el Consejo Superior de Deportes ha pedido al Tribunal Administrativo del mismo que llegue hasta donde sea necesario para demostrar la ilegalidad de las pasadas elecciones en el seno de la Federación de Fútbol tras las escandalosas declaraciones del vicepresidente Juan Padrón y que ensucian la selección de la Asamblea, según publica Marca.
"Los árbitros votan lo que yo les diga porque, si no, los quito". Esta fue una de las muchas frases que comprometen al segundo de Villar en este turbio entramado. Tras personarse el juez Pedraz, a petición del CSD, como acusación del proceso, más de 8.000 documentos obran en poder de los abogados del Estado con un único objetivo: documentar al TAD de argumentos válidos para que se impugnen dichas elecciones.
Estas escuchas suponen una justificación más que suficiente para abolir todo el proceso electoral. Sin embargo, el CSD no tiene capacidad legal para intervenir en esta compleja situación. Dicho organismo espera que todos los pertinentes argumentos expuestos al TAD sean suficientes para actuar. Cabe recordar que el Tribunal Administrativo ya desestimó impugnar el proceso en una tirante tesitura con advertencia amenazante de Rubiales de por medio.