Los beneficios económicos que obtendrá Rusia del Mundial de fútbol que acogerá a partir del próximo 14 de junio serán a corto plazo, advierte la agencia internacional de calificación de riesgo Moody's, en un informe publicado este jueves."La mayor parte de los beneficios económicos ya se están notando a través de las inversiones en infraestructuras, pero incluso ahí son limitados. Las inversiones entre 2013 y 2017 motivadas por el Mundial sólo sumaron un 1 % del total de las inversiones" en ese periodo, señala el documento.
Los estímulos económicos que obtendrá Rusia durante la competición, que sólo dura un mes, "palidecen al lado del volumen de la economía rusa, cifrada en 1,3 billones de dólares", subrayó la vicepresidenta de Moody's, Kristin Lindow.
"No creemos que el campeonato haga una aportación de peso al crecimiento económico de Rusia", agregó.
Las finanzas de las once sedes que acogerán partidos del Mundial correrán distinta suerte en los próximos años, en función del estado de sus arcas públicas, la inversión afrontada para el campeonato y las funcionalidad del legado que dejará la competición.
Saransk y Kaliningrado saldrán ganando, dado que las nuevas infraestructuras les aportarán en los próximos años mayores ingresos fiscales y reducirán sus inversiones en grandes proyectos, acometidos para acoger el Mundial, según Moody's.
Por contra, San Petersburgo y Samara, dos de las ciudades más pobladas de Rusia, arrastrarán un mayor endeudamiento en sus cuentas como resultado de las inversiones en infraestructuras mundialistas.
Los hoteles, comercios, transportes y telecomunicaciones incrementarán sus ingresos durante el mes que dura la competición, pero sus beneficios no irán más allá de cuando acabe el campeonato, según la agencia internacional, con sede en Estados Unidos.
"Los aeropuertos de Moscú están entre los mayores beneficiados en el sector transportes, dado que su modernización ayudará a incrementar el flujo de pasajeros incluso después del evento" deportivo, concluye el documento.
Mientras, la organización del Mundial de Rusia ha estimulado un crecimiento del 1 % del Producto Interior Bruto (PIB) en el último lustro, cuando en Brasil 2014 fue del 0,6 %.
El comité organizador de Rusia 2018 estima en 15.000 millones de dólares -2.000 millones de ellos vinculados al turismo- el impacto que ya se ha producido en la economía nacional desde 2013.
De esta forma, Rusia supera en cifras absolutas a los organizadores de los últimos cuatro mundiales (Brasil, Sudáfrica, Alemania, Corea del Sur y Japón).
Según Rusia, se crearon 220.000 puestos de trabajo, lo que ha permitido a la población incrementar sus ingresos en casi 7.000 millones de dólares.
Al mismo tiempo, la organización considera que en los próximos cinco años (2019-2023) el impacto del torneo en la economía nacional será de unos 3.000 millones de dólares anuales.