El joven portero argentino Facundo Espíndola, que jugó toda su carrera en categorías inferiores a la Primera División argentina, perdió la vida el pasado domingo tras una reyerta en el exterior de un bar tras recibir una cuchillada en el tórax.
Los hechos ocurrieron alrededor de las 6:30 de la mañana en Hurlingham, provincia de Buenos Aires.
Uno de los dos detenidos es Nahuel Oviedo, delantero de San Telmo, equipo de la tercera división del fútbol argentino. El futbolista es sospechoso de haber sido el autor de la agresión que acabó con la vida de Espíndola y fue cazado en un coche con manchas de sangre junto al otro detenido, de nacionalidad paraguaya.
El arma del crímen también fue encontrada a 15 manzanas del lugar de los actos. No es la primera ocasión en la que Oviedo tiene problemas con la justicia, ya que en 2011 fue condenado por un robo del que admitió su culpabilidad.