Uno de los goles más tontos del año se pudo ver la pasada semana en la liga de Perú. El segundo clasificado, el Melgar, recibía al colista, el Sporting Rosario y los primeros se adelantarían con una buena dosis de fortuna. Después de un rechace del portero, John Carlos Tapia Herrera le pegó una patada al aire al intentar despejar un balón y terminó colándose la pelota en su propia portería. Los visitantes tienen difícil salir del pozo con jugadas así.