El campeón de la Liga de Naciones que se disputa esta temporada recibirá 10,5 millones de euros según confirmó la UEFA, que anunció que aumentará un 50 por ciento el pago de solidaridad para las 55 federaciones que toman parte.
Según los datos facilitados por la UEFA este miércoles tras ese incremento, la participación en la fase de grupos aportará a las selecciones de la Liga A 2,25 millones de euros (incremento de 750.000€) y 1,5 millones a las de la Liga B (incremento de 500.000€).
Las selecciones de la Liga C percibirán 1,1 millones de euros (incremento de 375.000€) y las de la Liga D 750.000€ (incremento de 250.000).
Los ganadores de la fase de grupos en las Ligas A, B, C y D tendrán un aumento del 50% en sus bonus. Los de la Liga A percibirán ahora 2,25 millones€, los de la Liga B 1,5 millones€, los de la Liga C 1,1 millones€ y los de la Liga D 750.000€ .
La UEFA precisó que el máximo pago por solidaridad y bonus para una selección de la Liga A sería de 4,5 millones de euros, 3 millones para la Liga B, 2,25 millones para la Liga C y 1,5 millones para una de la Liga D.
Las cuatro campeonas de la Liga A, que competirán por el trofeo en junio de 2019, obtendrán unos ingresos de solidaridad aparte que se cifrarán en 6 millones para la ganadora del título, 4,5 para la subcampeona, 3,5 para la tercera clasificada y 2,5 para la cuarta.
"La decisión de incrementar los pagos por solidaridad y los bonus fue tomada por el Comité Ejecutivo de la UEFA y ha sido posible gracias a la sólida situación económica de la UEFA, que se ha visto ayudada en parte por los ingresos de la UEFA EURO 2016 destinados a futuras inversiones", señaló el organismo en un comunicado.
We're increasing UEFA #NationsLeague 'solidarity' payments by 50% to all 55 national associations - helping to develop the European game while providing more competitive football in the process.
Want a full breakdown of all the figures? ?https://t.co/z3E9qtjNeZ
— UEFA (@UEFA) 10 de octubre de 2018
En el mismo recordó que la Liga de Naciones, que se puso en marcha el mes pasado, se gestó tras el diálogo de la UEFA con federaciones, entrenadores, jugadores y aficionados "entre los cuales crecía cada vez más la opinión de que los partidos amistosos no ofrecían el adecuado estímulo competitivo a las selecciones nacionales".