Un pequeño gran campeonato

El fútbol no deja de sorprender. Sea cual sea su modalidad, o categoría, el deporte rey actúa como motor para cambiar vidas. También para la inclusión de personas que lo necesitan. Con ese motivo se ha creado la Copa América de talla baja.

El pasado domingo terminó esta cita revolucionaria en el mundo, que ha congregado a nueve selecciones americanas de pequeños futbolistas. Todos con un mismo objetivo. Más allá de alzarse con el campeonato, la principal premisa es la de concienciar a la sociedad.

Acorde a los protagonistas, el campeonato se disputa en distancias reducidas, en campos de fútbol sala. De hecho las reglas son las mismas que en el futsal, aunque juegan siete jugadores por equipo. La diferencia es que las porterías son más pequeñas, con 1.70 metros de altura y dos metros de anchura.

Una Copa América integradora en la que estuvieron Argentina, Brasil, Bolivia, Chile, Colombia, Paraguay, Perú, una selección mixta de Estados Unidos y Marruecos como invitada especial.

"Creo que pronto estaremos en unos Juegos Paralímpicos en la categoría de fútbol de talla baja"

Un campeonato que acumula más objetivos, como el de terminar siendo incluidos en los Juegos Paralímpicos: "Todavía no estamos reconocidos como un deporte paralímpico, pero creo que pronto estaremos en unos Juegos Paralímpicos en la categoría de fútbol de talla baja", comentó uno de los protagonistas.

Entre todos ellos destaca Diego Serpentini, una promesa argentina de 16 años que sorprendió al mismísimo Messi. "Pude conocer a Leo Messi y me dijo que había escuchado positivamente hablar de nosotros. Si llegó a oídos de él fue porque el proyecto se ha difundido bien"

Finalmente fue Paraguay quien se alzó con el torneo, de manera invicta. Los guaraníes se impusieron a la anfitriona Argentina en la final, venciendo 3-0. El tercer y cuarto puesto lo disputaron Brasil y la selección mixta de EEUU, venciendo la 'canarinha' por 10-1.