Andrea Montolivo
Roma, 9 nov .- El portugués Cristiano Ronaldo, delantero del Juventus, visitará este domingo San Siro para enfrentarse al Milan del técnico Gennaro Gattuso, un hombre que en su carrera de jugador consiguió anularle en un duelo entre "rossoneri" y Manchester United de la Liga de Campeones de 2007.
Once años después de ese cruce, Cristiano saltará al campo de San Siro como líder del Juventus, mientras que Gattuso intentará contenerle esta vez desde el banquillo, como preparador de un Milan que sueña con alcanzar una plaza en la próxima Liga de Campeones.
El portugués llega lanzado a la cita de San Siro, tras marcar siete goles ligueros y uno, con una volea espectacular, en Europa; Gattuso le recibirá al frente de un Milan que, a base de compromiso y entrega, logró encadenar tres victorias ligueras consecutivas, dos de ellas con goles en el tiempo añadido.
CR7 y "Ringhio" serán dos de los protagonistas de un partido de enorme tradición del fútbol italiano, un cruce particular que en 2007 vio al actual técnico "milanista" dar su significativa aportación para el pase a la final de Atenas.
Era la semifinal de vuelta de la Liga de Campeones 2006-2007 y en un San Siro completamente lleno se enfrentaban el Manchester United del técnico escocés Sir Alex Ferguson y el Milan del entrenador italiano Carlo Ancelotti.
Eran dos plantillas de primer nivel: el United contaba con un Cristiano con 22 años, los ingleses Wayne Rooney, Paul Scholes, Gary Neville o Rio Ferdinand, el galés Ryan Giggs o el meta holandés Edwin Van Der Saar.
Por su parte, el Milan lucía a jugadores como los campeones del mundo Andrea Pirlo, Alessandro Nesta o Filippo Inzaghi, el holandés Clarence Seedorf, los brasileños Ricardo Kaká, Nelson Dida o Cafú, además de Paolo Maldini, ausente esa noche.
Ambos conjuntos ya habían dado muestra de su poderío en los cuartos de final: el United eliminó al Roma tras aplastarle 7-1 en Old Trafford, mientras que el Milan superó al Bayern Múnich con un autoritario 2-0 en Alemania tras el 2-2 de San Siro.
También protagonizaron uno de los partidos más espectaculares de los años 2000 en la ida de las semifinales, cuando el equipo de Ferguson triunfó 3-2 con gol de Rooney en el tiempo añadido para remontar un demoledor doblete del entonces Balón de Oro Kaká.
Ese 3-2 obligaba al Milan a una hazaña en San Siro para conseguir el billete para la final de Atenas y allí Gattuso consiguió anular completamente a Cristiano Ronaldo, que a los 22 años ya dominaba en la Premier League con 17 goles.
El centrocampista italiano aportó sacrificio, esfuerzo y también algunos golpes duros para marcar su territorio y ralentizar al astro luso.
Fue un duelo de alto voltaje y la agresividad deportiva de "Ringhio", un jugador que siempre hizo de la entrega la parte fundamental de su juego, llevó a unas polémicas con CR7, fastidiado por el trato recibido.
Finalmente, Cristiano no logró ser peligroso en fase ofensiva, solo lo intentó con unos disparos de falta directa, y los goles de Kaká, Seedorf y Alberto Gilardino determinaron un 3-0 que dio al Milan el pase a la final contra el Liverpool.
Era la revancha más esperada por los "rossoneri", que dos años antes había desperdiciado una ventaja de tres goles en Estambul contra el conjunto inglés y se habían rendido en la tanda de penaltis.
Una revancha que se concretó en Atenas, cuando un doblete de Inzaghi decidió un partido terminado finalmente 2-1 y le entregó al Milan la séptima Copa de Europa de su historia.
La eliminación en esa semifinal fue una amargura para Cristiano, aunque el portugués supo usarla como empuje para forjar en los años siguientes una carrera de leyenda.
Conquistó la Copa de Europa el año siguiente con el Manchester United en Moscú contra el Chelsea y levantó la "Orejona" otras cuatro veces en el Real Madrid, en 2014, 2016, 2017 y 2018, coronándose además con cinco Balones de Oro.