El Valencia, el Nápoles y el Chelsea cumplieron con su papel de favoritos y dieron un paso hacia los cuartos de final de la Liga Europa, tras imponerse este jueves en unos encuentros de ida de los octavos de final en los que el gol tuvo un marcado acento español.
Una faceta en la que destacó sobremanera el internacional español Rodrigo, que confirmó su excelente estado de forma, con un doblete ante el Krasnodar, que permitirá al Valencia afrontar con ventaja el choque de vuelta, tras vencer en Mestalla por 2-1 al conjunto ruso.
Dos tantos en las que Rodrigo demostró sus dotes como goleador, ya que si en el primero evidenció la precisión y potencia de su disparo con un sensacional zapatazo desde fuera del área, en el segundo demostró su capacidad de llegada.
Pero los goles de Rodrigo no fueron los únicos que dotaron de sabor español a la jornada de la Liga Europa, ya que tanto Pedro Rodríguez como Fabián, fueron determinantes en los triunfos del Chelsea y del Nápoles.
Pedro fue el encargado de abrir el marcador para el conjunto londinense ante el Dinamo de Kiev, tras culminar a los 17 minutos una pared en el interior del área con el francés Olivier Giroud, que asistió el español con un soberbio taconazo.
Un resultado que se encargaron de redondear para el Chelsea en la segunda mitad el brasileño Willian con un gol de falta y Callum Hudson-Odoi, que estableció el definitivo 3-0 para los Maurizio Sarri en el último minuto del tiempo reglamentario.
Igualmente preciso se mostró el centrocampista Fabián Ruiz, que selló la victoria del Nápoles sobre el Salzburgo, semifinalista el pasado curso, al anotar a los 18 minutos el segundo tanto de los de Carlo Ancelotti, que finalmente se impusieron por 3-0.
Sello español llevaron también los tres tantos del Villarreal, que se olvidó de sus problemas ligueros y puso pie y medio en los cuartos de final, tras imponerse este jueves por 1-3 en su visita al campo del Zenit de San Petersburgo.
Si los cabezazos de Vicente Iborra y de Gerard Moreno encarrilaron el partido para los castellonenses, el jovencísimo Manu Morlanes fue el encargado de sentenciar el partido y probablemente la eliminatoria para el Villarreal, tras establecer el definitivo 1-3 con un disparo desde la frontal del área a los 71 minutos.
Una eliminatoria que el Sevilla, el club más laureado de la competición con cinco títulos, deberá resolver la próxima semana en su visita a la capital checa, tras empatar este jueves 2-2 en casa con el Slavia de Praga.
Empate que nadie hubiera podido imaginar tras la contundente puesta en escena del conjunto andaluz, que antes del minuto de juego ya dominaba en el marcador, gracias a un tanto del francés Wissam Ben Yedder.
Pero ni el tempranero tanto del Sevilla amilanó al Slavia, que logró igualar hasta en dos ocasiones el marcador con los tantos de Miroslav Stoch y Alex Kral, que estableció el definitivo 2-2 once minutos después de que Munir volviese a situar a los andaluces por delante, al rematar completamente sólo un saque de esquina botado por Banega.
Si el Sevilla tendrá que mostrar su mejor versión en Praga para superar la eliminatoria ante al correoso conjunto checo, el Arsenal, que entrena el español Unai Emery, tendrá que apelar a la épica para remontar el 3-1 que encajó en el campo del Rennes.
El conjunto francés, que ya apeó de la competición en los dieciseisavos de final al Betis al imponerse por 1-3 en el Benito Villamarín, confirmó su condición de equipo revelación con una nueva vibrante actuación ante el conjunto inglés.
Un Arsenal que pareció encarrilar la contienda, tras adelantarse en el marcador a los cuatro minutos de juego con un gol (0-1) del nigeriano Alex Iwobi.
Pero el Rennes, en el que de nuevo volvió a brillar la figura de Hate Ben Arfa, no se rindió y aprovechando la inferioridad numérica del Arsenal, que se quedó con un hombre menos a los 41 minutos por la expulsión del central griego Sokratis Papastathopoulos dio la vuelta al tanteador.
Los goles de Benjamin Bourigeaud, Nacho Monreal en propia meta y el senegalés Ismaila Sarr que estableció en el 88 el definitivo 3-1, culminaron la remontada de un Rennes que no quiere dejar de soñar en la Liga Europa.
Igualmente se verá obligado a ganar si quiere acceder a los cuartos de final el Inter de Milán, que no pudo pasar del empate 0-0 en el campo del Eintracht de Fráncfort, en un choque en el que los italianos desperdiciaron un penalti a los veintidós minutos.
El portero germano Kevin Trapp adivinó las intenciones del croata Marcelo Brozovic y detuvo la pena máxima, dejando todo por decidir para un encuentro de vuelta, en el que el Inter no puede permitirse ni el más mínimo fallo.
Por su parte, el Benfica deberá mejorar notablemente la imagen que mostró este jueves en Croacia si quiere superar a un Dinamo de Zagreb, que se impuso este jueves a los "encarnados" por 1-0 gracias a un gol de penalti de Bruno Petkovic, que no desaprovechó la pena máxima cometida sobre el español Dani Olmo.