El expresidente de la UEFA y antigua estrella del fútbol francés Michel Platini y personalidades del balompié sueco despidieron este miércoles en Estocolmo a Lennart Johansson, exdirigente de UEFA y FIFA fallecido a los 89 años el pasado día 5.
Entre los asistentes al funeral celebrado en la iglesia de Santa Catalina figuraban entrenadores como Sven-Göran Eriksson, varios exseleccionadores suecos como Lars Lagerbäck y futbolistas retirados como Patrik Andersson.
"Tuvimos nuestras luchas, pero era un buen tipo. Le tenía respeto", dijo a la televisión pública sueca SVT Platini, sucesor al frente de la UEFA de Johansson, que presidió ese organismo entre 1990 y 2007 y fue también vicepresidente de FIFA.
Lagerbäck, actual seleccionador de Noruega, destacó que Johansson era alguien "con los pies en la tierra" y una persona "única".
Entre quienes portaron el féretro al salir de la iglesia figuraban Henok Goitom y Nebojsa Novakovic, capitán y técnico del AIK Solna, histórico club sueco al que el fallecido estuvo ligado desde su juventud y del que era presidente de honor desde 1999.
Lennart Johansson fue homenajeado anoche antes del partido de liga sueca entre el AIK y el Norrköpping con una ceremonia que finalizó con un minuto de silencio.
Johansson -nacido en Bromma (Estocolmo) en 1929- inició su carrera como funcionario en el AIK, en la sección de bandy, una especie de hockey sobre hielo sin patines, de donde pasó luego a la de fútbol, de la que formó parte durante tres décadas.
Después de ser presidente de la Asociación de Clubes Profesionales Suecos (1984-1991), dirigió la Federación Sueca de Fútbol (1985-1990), desde la que accedió a la cúpula del fútbol europeo y mundial.
Durante su etapa al frente de la UEFA, Johansson mantuvo una disputa con el suizo Sepp Blatter, quien le ganó en 1998 en las elecciones para presidir el máximo organismo del fútbol mundial.
Tras perder otras elecciones para ser reelegido como presidente de la UEFA en 2007 frente al francés Michel Platini, regresó a Suecia para concentrarse inicialmente en la promoción del "bandy", el deporte en el que había iniciado su carrera directiva.
Era un habitual de los partidos de fútbol del AIK, y el pasado otoño estuvo presente cuando se proclamó campeón de liga sueca, un torneo a cuyo ganador se le entrega desde 2001 la copa que lleva su nombre.