Sergio Ramos, capitán de la selección española, señaló la importancia de "matar los partidos" y no perdonar tantas ocasiones como en la primera parte ante Rumanía, y marcó el objetivo de hacer pleno de triunfos camino de la Eurocopa 2020.
"Sabíamos que iba a ser un estadio complicado y así ha sido. A pesar de que hemos hecho una grandísima primera parte para irnos con más ventaja en el marcador no fue así. Debemos aprender a matar estos partidos para no llegar al final con miedo a perder los tres puntos", dijo Ramos en TVE.
"Al final ganar fuera de casa y conseguir el objetivo te da tranquilidad, pero todavía no hemos hecho nada, queremos ser primeros de grupo y sumar los treinta puntos. Hay que seguir así, ahora descansar bien antes de jugar en Gijón", añadió.
Ramos recibió la cartulina amarilla en la celebración de su gol por hacer un gesto con las gafas que el colegio no entendió. "Lo hablé con el árbitro. Era para brindar el gol a mi sobrino que también lleva gafas de ver como yo y para decirle que no pasa nada por llevar gafas. Me dirigía a la cámara. Luego el árbitro se disculpó y lo lamentó".