El futbolista más viejo del mundo superó un cáncer por sus ganas de seguir jugando

Admiración es lo que despierta Dickie Borthwick, un británico de 83 años (cumple 84 en noviembre) que es el futbolista más mayor de su país y, casi seguro del mundo. Su edad no le priva de tener una gran motivación por seguir jugando, ya que ahora está sin equipo. Él, se ofrece la mejor postor: “Estoy en forma como un violín. Siento que soy capaz de jugar 90 minutos"

Así de claro lo contó en una entrevista con SPORTbible, donde le explicó al club que lo fiche que "daré el 100%. Soy sólido como una roca, bien construido, valiente y tengo un verdadero amor por el juego". Dickie Borthwick, un ingeniero retirado de Weymouth, una ciudad costera en Dorset, insiste en que "estoy muy disponible. Echo de menos jugar al fútbol terriblemente".

Dickie Borthwick: "Mi amor por el juego ciertamente me estaba impulsando a vencerlo (el cáncer) y lo he hecho"

Dickie Borthwick se mantiene en forma

Para quitarse el mono, el veterano jugador, practica en el jardín de su casa. "Hay una pared de ladrillos ahí abajo y, a menudo, practico mi tiro golpeando la pelota contra ella para mantener mis piernas móviles". Ejercicio y, también, una buena alimentación: "No como basura. Intento comer comida buena y saludable. ¿No quieres salir como un barril de cerveza, verdad?".

Todo esto se queda en nada cuando el bueno de Dickie Borthwick cuenta cómo sus ganas por seguir jugando al fútbol le hicieron superar hace unos años un cáncer. Le diagnosticaron cáncer de próstata, pero después de ocho semanas de tratamiento, el británico confirmó que esa dura etapa de su vida ya era historia: "Mi amor por el juego ciertamente me estaba impulsando a vencerlo (el cáncer) y lo he hecho".

La de Dickie Borthwick es una de esas bonitas historias que nos deja el fútbol y la vida. La fe de creer y la motivación y el optimismo de luchar contra lo que la sociedad pueda opinar mantienen con el espíritu más joven del mundo al futbolista más mayor del planeta.