La Haya, 18 nov (EFE).- La Fiscalía de Países Bajos anunció este lunes que investigará si hubo delito en los cánticos racistas sufridos por un futbolista de la Segunda división, Ahmad Mendes Moreira, que ha recibido el apoyo de figuras como el primer ministro Mark Rutte y el seleccionador Ronald Koeman.,“Nosotros, como selección de Países Bajos, abandonaríamos el campo. Alguien tiene que hacerlo”, dijo Koeman en la rueda de prensa previa al partido contra Estonia, que se juega este martes.,“En P
La Haya, 18 nov .- La Fiscalía de Países Bajos anunció este lunes que investigará si hubo delito en los cánticos racistas sufridos por un futbolista de la Segunda división, Ahmad Mendes Moreira, que ha recibido el apoyo de figuras como el primer ministro Mark Rutte y el seleccionador Ronald Koeman.
“Nosotros, como selección de Países Bajos, abandonaríamos el campo. Alguien tiene que hacerlo”, dijo Koeman en la rueda de prensa previa al partido contra Estonia, que se juega este martes.
“En Países Bajos somos demasiado suaves con esto, aceptamos de todo. A veces escucho que vivimos en un país seguro, pero yo no lo creo”, añadió el técnico, que pidió a las autoridades que tomen cartas en el asunto.
El futbolista del Liverpool Georginio Wijnaldum se mostró de acuerdo con Koeman, y dijo que él también habría abandonado el campo.
“Fue muy difícil ver esas imágenes, nunca esperé que algo así sucediera en Países Bajos”, explicó en rueda de prensa.
“Se trata de un problema social, es algo que la política debe tratar. Se deben tomar medidas contra este tipo de prácticas”, comentó el centrocampista, quien añadió que en la selección de Países Bajos “no se mira el color de piel, sencillamente vestimos la camisa naranja y queremos hacer feliz a la gente”.
Preguntado por qué medidas propondría para atajar el problema, respondió que es favorable de imponer “multas severas. Leí en alguna parte que debería haber cámaras en todas partes. El castigo debería ser tan duro que nadie lo volvería a hacer”.
El primer ministro de Holanda, Mark Rutte, también reaccionó a los incidentes racistas y dijo a la prensa neerlandesa que “fue terrible, realmente terrible". "No hay lugar para el racismo en Países Bajos, y mi homenaje al árbitro”, añadió en referencia a Laurens Gerrets, que detuvo temporalmente el encuentro y mandó a los futbolistas al túnel de vestuarios.
Además de las pesquisas anunciadas por la Fiscalía, la Federación Neerlandesa de Fútbol dio a conocer que estudia adoptar medidas.
“Estamos viendo cómo se puede rastrear y castigar a los perpetradores. Este incidente será investigado a través de un sistema disciplinario independiente”, dijo la federación en un comunicado.
El pasado domingo, el partido de la Segunda división holandesa Den Bosch-Excelsior Rotterdam fue detenido temporalmente en la primera parte debido a cánticos racistas contra un delantero visitante, Ahmad Mendes Moreira.
El árbitro mandó a los futbolistas al túnel de vestuarios durante quince minutos, mientras el jugador afectado se mostró visiblemente afectado y fue consolado por sus compañeros.
El encuentro se reanudó posteriormente a petición del Excelsior Rotterdam. Justo antes del descanso, Mendes Moreira marcó un gol y lo celebró dirigiéndose a la grada, abriendo los brazos y poniendo las manos en las orejas, entre los pitidos del público.
Sus compañeros se lo llevaron a los pocos segundos, pues cayeron algunos objetos desde las butacas, y luego Mendes se llevó el dedo índice a la boca, haciendo como que mandaba a callar.
El partido terminó 3-3 y el jugador dijo luego a la cadena “Fox Sports” que, además de los cánticos racistas, oyó insultos dirigidos hacia él por el color de su piel desde el primer minuto de juego.
Aseguró que le “dolió mucho” lo que escuchó en el campo y que el gol fue “la mejor manera de dar una respuesta”.
Por otro lado, el Den Bosch emitió este lunes un comunicado en el que le pidió disculpas al futbolista y aseguró que “hará todo lo posible para encontrar y castigar a los culpables”.
El club dijo que anunciará un plan de acción esta semana para luchar contra el racismo en sus gradas.